Decepcionado y sumamente crítico se mostró el periodista y escritor Álvaro Vargas Llosa con el gobierno encabezado por Ollanta Humala. El hijo de nuestro premio Nobel tuvo una extensa conversación con Glatzer Tuesta para el programa No hay Derecho de Ideeleradio donde se abordó diferentes temas de coyuntura política. Entre otras cosas, señaló que "este es un gobierno mediocre".


#DINILEAKS

El periodista recordó que él fue uno de los críticos más severos cuando se hicieron públicas las primeras sospechas del trabajo irregular de la Dirección Nacional de Inteligencia (reglaje y acopio de información). Para Vargas Llosa, Ollanta Humala ha continuado con una práctica nefasta propia del fujimorismo y  del segundo gobierno aprista.

"Decir que otros gobiernos hacían lo mismo no es justificación. Se supone que este gobierno iba a estar alejado de estas prácticas nocivas".

Con respecto a la responsabilidad de la pareja presidencial sobre el acopio de información a políticos, periodistas y empresarios indicó que "es muy difícil determinar hasta que punto ellos estaban al tanto". No obstante, recalcó que, llegado al poder, Humala hizo importantes cambios en la seguridad nacional, como reorganizar los servicios de inteligencia que le rendían cuentas a él. Así se hace complicado creer que el líder del nacionalismo no sabía nada.


Ana Jara

A pesar de ser una figura importante del Ejecutivo, el autor de El diablo en campaña (1991), indicó que la premier es una víctima de la crisis desatada por los #Dinileaks. Vargas Llosa tuvo palabras elogiosas para Jara ya que consideró que es uno de los cuadros más importantes del nacionalismo. Sobre su posible censura, señaló que la oposición debe tener cuidado ya que su salida podría beneficiar al ala dura del gobierno.

"Desde un punto de vista moral correspondería una acción muy drástica[..]. No me alegra la perspectiva de que se aleje. Lo razonable hubiera sido que se quedé hasta el final del gobierno, pero también es cierto que si se queda a toda costa, el nivel de desgaste puede ser muy alto. [...] Ahora desde otro punto de vista, puede que sacar a un gabinete con modales democráticos sea peor".


Urresti y Cateriano rumbo al 2016

Con respecto a la candidatura de Daniel Urresti (acusado por la Fiscalía por el asesinato de Hugo Bustíos), promovida con entusiamo por Nadine Heredia, el escritor no dudó en mostrar su más enérgico rechazo. Esta postulación solo puede entenderse -según Vargas LLosa- como una medida desesperada de tener la mayor cantidad de escaños para defender al gobierno nacionalista luego del 2016. Señaló que no se puede jugar con la democracia de esa manera. 

"[...] es inconcebible que a este personaje [Urresti] lo hayan nombrado ministro del Interior. Es decir, que pongas a la cabeza de ese aparato tan importante a una persona con esas credenciales, independiente de que sea culpable o no, ya es suficiente para invalidarlo con un cargo de esa naturaleza".

Para el entrevistado, Pedro Cateriano representa una opción más viable para defender al gobierno de Gana Perú. Indicó que el actual ministro de Defensa sería un buen candidato a la cabeza de una lista parlamentaria.


Martín Belaunde Lossio

Sobre el caso que involucra al exasesor electoral de Humala, señaló que se trata de uno de los tantos "personajillos" que luego de las elecciones se acercaron tanto a Ollanta Humala como a Nadine Heredia y que ambos cometieron el error de abrirles las puertas del poder. 

“[...] en el mejor de los casos cometieron un gravísimo pecado de negligencia porque les permitieron un cierto acceso, pulular por ahí a todos estos personajes que, evidentemente, con este tipo de credenciales no ofrecían ninguna perspectiva demasiado saludable y, por eso, no me extraña que estén envueltos en tantos escándalos”.

Comentó, además, que le sorprende la demora para resolver este caso con prontitud. Esa lentitud, indicó, es explotada con exageración por la oposición.


El espionaje chileno

Vargas Llosa no extrapoló el tema que ha generado desavenencias entre el Perú y su vecino sureño. El autor de La mestiza de Pizarro (2003) tiene claro lo que debe hacer un Estado ante este tipo de casos.

"El espionaje entre países es la segunda profesión más antigua del mundo. Yo lo que hago es observar lo que hacen otros países en estos casos. Si se encuentra pruebas de espionaje, se hace público y luego se hace pagar un precio muy alto al país que espía. Después, el tema pasa a conductos más discretos para reactivar-si existe la voluntad- las relaciones".

En ese sentido, indicó que el Perú ha tomado un camino similar aunque acotó que la coyuntura interna, que involucra un espionaje local, no ayuda al gobierno a pasar la página.

 

notas relacionadas en lamula.pe:

El presidente acorralado por los "guardianes de la democracia"

Juegan en pared: Alan García y Keiko Fujimori piden la cabeza de Ana Jara

#Portadasdeldía: Las tragedias revelan las flaquezas del gobierno

Ex oficial de la DINI rompe su silencio sobre rastreo a políticos, empresarios y periodistas