La nostalgia puede hacer cosas extrañas y maravillosas con la mente. Tiene la misteriosa capacidad de hacer del pasado un lugar de total comodidad, libre de los problemas y dificultades que tienden a plagar la vida adulta. Es por eso que cuando recordamos las películas que pasamos horas viendo cuando eramos más jóvenes lo hacemos con un cariño añadido; casi al punto en que no queremos creer que no son perfectas.

La trilogía original de Star Wars, quizás más que cualquier otra serie películas, parece sufrir de un caso extremo de esta clase de nostalgia; sobre todo a raíz de las terribles precuelas, que sólo sirvieron para aumentar el odio al muy criticado escritor/director George Lucas. Tan grandes como son las películas originales de Star Wars, no son perfectas; independientemente de lo que los fans podrían querernos hacer creer.

Sí, parece casi blasfemo admitir fallas en un producto que tanto significa para muchos. Pero resaltar las faltas no es burlarse de la trilogía original; sólo sirve para confirmar el hecho de que son películas y nada más que películas.

Aquí diez problemas (en cuenta regresiva) con la trilogía original de Star Wars que nadie quiere admitir...


10. Luke Skywalker es un protagonista vergonzoso

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Cuando uno se pone a pensarlo por un buen rato, se vuelve evidente que Luke Skywalker en realidad es un personaje muy extraño. Uno esperaría que el protagonista principal en una película como Star Wars tuviera algunos rasgos interesantes y sin embargo nada resalta. No es fácil para los aficionados a admitir que el más famoso tipo en todo el canon de Star Wars es un poco idiota; pero - en general - es verdad: Luke es un santurrón sin interés, sin sentido del humor y un poco aguafiestas. No tiene ningún atractivo sexual y es frecuentemente extraño.

Podría haber sido más fácil perdonar a Luke si se hubiera transformado con éxito en un tipo duro. Pero incluso cuando se supone que debe ser un tipo duro - en El Regreso del Jedi, por ejemplo - todavía se siente incómodo en su propia piel. Es la definición del el término "anti-cool." Si eso es culpa de elegir a Mark Hamill, ¿quién puede decirlo? La verdad es que Luke es tan sólo marginalmente mejor que Hayden Christensen como Anakin Skywalker; en realidad tiene sentido que estos dos sean padre e hijo.


9. La mayor parte del diálogo es horrible

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Los fans de Star Wars que suelen odiar las precuelas pero aman las originales tienden a tener una especie de retorcido placer al citar el diálogo horrible de los Episodios I, II y III, como una forma abreviada de decir: las precuelas son malas y mucho. Esas indignas precuelas incluyen joyas como estas: "no me gusta la arena "," Estás rompiendo mi corazón ", y el imprudente "Ojalá pudiera... ¡desear que mis sentimientos desaparecieran!" 

También esta la imperdonable: "Desde mi punto de vista, los Jedis son malos", cortesía de Anakin Skywalker.

Es cierto: esas líneas son abominables. Pero el diálogo que puebla la trilogía original de Star Wars no es precisamente mejor. De hecho, se puede argumentar fácilmente que es malo y se ha sostenido solo tomando en cuenta el hecho de que la película es "vieja" ahora, y la gente tiende a perdonar el diálogo pesado y expositivo en películas que con las que ha crecido. Honestamente, hay un montón de líneas cursis en toda la trilogía original. ¿Quién puede perdonar una linea como: "Iba a la estación Tosche a recoger algunos convertidores de energía"?


8. Boba Fett está un tanto sobrevalorado

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¿Blasfemia? Es posible. Pero no pretendas que no los has pensado al menos en un par de ocasiones; después de todo, se trata de un personaje que se define por su capacidad de permanecer ahí sin  hacer mucho. Sin tomar en cuenta las precuelas,  ¿no hay mucha sentido para Boba Fett, no? Por no mencionar el hecho de que en El Regreso del Jedi tiene una de las muertes más frívola en la historia del cine. Es cierto que Fett es relevante sobre todo por el factor de misterio que trae a la historia. ¿Pero está este tipo realmente justificado?

No se debe confundir esta crítica como un ataque completo al personaje de Boba Fett: hay algo innatamente atractivo en él, la mayoría de eso proviene del hecho de que no se sabe muy bien cuales son sus motivos, lo que realmente piensa, o cómo que ha alcanzado tal estatus legendario dentro de los confines del universo Star Wars. Pero cuando te acercas a el desde un punto de vista más neutral, Boba Fett no es ni de lejos tan brillante como lo pintan. ¿Icónico ? Claro. ¿Cool? No tanto.


7. Las peleas de sables de luz son ordinarias

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Esto puede atribuirse a la época en que se hicieron las películas, aunque técnicamente no tiene mucho sentido: echa un vistazo a las cosas que Bruce Lee estaba haciendo en ese momento. Así que aquí está uno de los aspectos en el que las precuelas ciertamente superan a las viejas películas; las peleas con sables de luz en los Episodios I, II y III son mucho más estimulantes visualmente que las de la trilogía original.

Eso no quiere decir que los duelos con sables de luz no mejoran mientras la trilogía progresa;  hay una notable diferencia en los niveles de energía del duelo entre Obi-Wan y Darth Vader en Una Nueva Esperanza y lucha de Luke contra Vader en El Imperio Contraataca y El Regreso del Jedi. Sin embargo, mirando hacia atrás, esos enfrentamientos "emocionantes", es casi desconcertante en cuanto a lo torpes y coreografiadas que se ven.


6. Casi no hay personajes femeninos

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Star Wars no es reconocida por tener una amplia variedad de personajes femeninos sólidos, y eso es porque sólo hay una. La Princesa Leia es la única mujer memorable de la trilogía original, y aunque es un hueso duro de roer que no se traga ningún discurso ajeno, también está volando en solitario en ese frente. Trata de evocar la imagen de otro personaje femenino sólido en las películas originales de Star Wars. Lo más probable es que todo lo que consigas sea "esa mujer que dice 'El Emperador ha hecho un error crítico' en El Regreso del Jedi".

Bueno, así que por lo menos esta la Princesa Leia, ¿cierto? Y es un personaje femenino bastante bueno, incluso un modelo a seguir: es la mejor con una pistola láser en todo el universo de Star Wars, y es inteligente, capaz y heroica. Aunque también andan rescatándola todo el tiempo. De todos modos, Star Wars VII: The Force Awakens parece haber puesto un personaje femenino al frente y al centro; tal vez como una forma para corregir ese desequilibrio de género.


5. El marco de tiempo en El Imperio Contraataca no tiene sentido

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Hay algo un poco fuera de lugar en el marco de tiempo al centro de la que es posiblemente la mejor película de Star Wars jamás hecha; algo que muchos fans parecen haber ignorado lo largo de los años, a pesar del hecho de que deja a la película sintiéndose algo desordenada. El Imperio Contraataca tiene una organización del tiempo muy rara, en la que los acontecimientos que se editan como si estuvieran sucediendo al mismo tiempo; y seguramente esto no podría haber sido así, tomando en cuenta las características específicas. Y tan solo pensarlo ya es doloroso.

Entonces, ¿a qué nos referimos exactamente? Al lapso de tiempo que se produce cuando Han, Leia y los demás se separan de Luke Skywalker. Las aventuras de Han y Leia parecen tener lugar en el transcurso de unos pocos días, mientras que el entrenamiento de Luke con Yoda parece abarcar semanas (y eso es ser generoso, ya que aprender a ser un Jedi seguramente tomar aún más tiempo) Y sin embargo, la película coloca a estos eventos uno al lado del otro; creando un marco de tiempo raro que, mirado de cerca, realmente no se sostiene.


4. Todo el asunto de "Yo soy tu padre" es cuestionable

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Sí, es lo más emblemático que alguna vez adornó el medio cinematográfico, y sí, da a la trilogía un carácter de mayor peso y drama, pero - cuando te pones a pensarlo - la cosa no tiene ningún sentido en absoluto. Y eso es realmente porque George Lucas nunca planeó que Luke y Vader estén relacionados hasta que se embarcó en la película y decidió que sería mucho más cool si los dos estaban entrelazados del algún modo. Tenía razón, pero hay algunos problemas inherentes a este pequeño giro.

Por un lado, cambia enteramente la primera película, en el sentido de que resulta que Obi-Wan simplemente le mintió a Luke sobre el paradero de su padre sin razón. En el momento en que Una Nueva Esperanza se hizo, por supuesto, se suponía que el diálogo de Obi-Wan era sincero, pero este giro le hace deshonesto en retrospectiv. A continuación Darth Vader intenta matar a Luke al final de Una Nueva Esperanza durante la Batalla de Yavin. ¿No habría sabido que estaba tratando de matar a su hijo?


3. El Imperio Contraataca no tiene un final apropiado

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El imperio contraataca es comúnmente elegida la mejor de todas las películas de Star Wars. Sin embargo, hay que señalar que el segundo episodio de esta amada saga toma algunas libertades en su narrativa; sobre todo en su final. Si pensamos que las películas deben existir como entidades independientes, con principios, medios y finales, entonces esta se queda corta. En pocas palabras, culmina en un melodrama sin concesiones, dejando a los personajes - y al público - en el limbo.

Como el escritor/director Joss Whedon dijo tan brillantemente durante una discusión sobre la película: "El Imperio Contraataca cometió el pecado capital de no acabar en realidad. En ese momento yo estaba horrorizado y sigo pensando que fue una idea terrible. No es un final. Es un: vuelva la próxima semana, o en tres años. Y eso me molesta. Voy a las películas esperando tener una experiencia completa. Si quiero una película que no termine voy a ir a ver una película francesa. Eso es una traición de mi confianza. Una película tiene que ser completa en sí mismo, no se puede simplemente construir en base a la primera o jugar a las variantes."


2. Han Solo actúa como un gran cobarde en El Regreso del Jedi

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Han Solo es reconocido como uno de los personajes más rudos del cine y cuenta además con un pícaro encanto; el tipo de hombre que dispara primero y hace preguntas después. No es el tipo de persona que se deprime y se pone sensible cuando sospecha que no le gusta a una mujer; ese es exactamente el tipo opuesto de comportamiento que se espera de un hombre que hizo la carrera Kessel en menos de doce pársecs. No, pero de acuerdo a El Retorno del Jedi, a Han Solo lo ha reemplazado un cobarde certificado.

En serio: estár encerrado en carbonita debe haber malogrado el cerebro de Han. En la tercera película de Star Wars, Han es  francamente vergonzoso de ver. Se pone sensible y celoso cuando comienza a sospechar que Leia tiene sentimientos por Luke. Ese no es el personaje del que nos enamoramos.


1. El Regreso del Jedi es en realidad una fantasía de poca monta

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Aquí está la cosa que la mayoría de los fans de Star Wars tienen más miedo de admitir. Si no lo has hecho ya, vuelve a echar un vistazo a El Regreso del Jedi y tratar de verla honestamente. Lo que encontrarás es una película que funciona mejor en tu memoria de lo que realmente lo hace en la pantalla. En su mayoría, El Regreso del Jedi es desordenada y desenfocada fantasía de poca monta. Nada cercano a la forma en que el diálogo, el trabajo de cámara, y la narrativa confluían en El imperio Contraataca. Todo se siente un poco a medias, para ser honestos. 

La mejor parte de la película, por supuesto, es el comienzo: Luke Skywalker y sus amigos tratan de rescatar a Han Solo de las garras de Jabba; es tenso, dramático, creativo y también cuenta con una de las mejores movidas de toda la saga: Luke Skywalker - ahora empuñando una espada de luz verde - pelea contra Jabba y sus compinches sobre el pozo del temido Sarlacc. También está la Princesa Leia en ese bikini dorado. Sin embargo, incluso esta secuencia épica no puede salvar al resto de la película, que es - en términos generales - lenta y un poco aburrida. Especialmente las partes de los Ewoks.

Hay una especie de sentimiento de resignación general en la atmósfera de El Regresodel Jedi: casi como si todos los involucrados tenía ganas pasar a cosas diferentes, pero fueron obligados por contrato a volver a participar. Incluso la trama se siente como un refrito de los elementos exitosos de episodios anteriores; especialmente eso de la segunda Estrella de la Muerte. Hay unos pocos momentos icónicos, y algunas escenas de acción memorables, pero la nostalgia parece darle mucho más crédito del que se merece: en realidad, es peor que La Venganza de los Sith.



[Vía: What Culture]


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