La negociación del nuevo protocolo sobre cambio climático –que debería ser aprobado en la cumbre mundial de diciembre en París– será larga y compleja pero de momento representantes de los 196 países reunidos la semana pasada en Ginebra presentaron un primer borrador.

El sólo hecho de tener un texto con 1,234 opciones (parágrafos alternativos, con propuestas que pueden ser aceptadas o rechazadas en el documento final) reflejan esta dificultad. 

Aquí, un vistazo a lo que se discutió en Suiza.

1. Uno de los puntos prioritarios en la agenda sigue siento el debate de los mecanismos de revisión y control de compromisos que tendrá el Acuerdo de París. En tanto que en Ginebra ha cobrado fuerza la opción de que haya partes del futuro pacto jurídicamente vinculantes y otras que no lo sean, para que países como Estados Unidos no tengan problema en adoptarlo, la clave del cumplimiento del acuerdo recaerá en un eficaz proceso periódico de monitoreo y revisión de los compromisos.

2. Observadores  de las negociaciones indican que está prácticamente descartado que el nuevo acuerdo establezca penalizaciones para quienes no cumplan lo prometido –como hizo el Protocolo de Kioto, aunque finalmente no llegaran a aplicarse– por lo que el peso del cumplimiento recaería en un proceso de revisión transparente.

3. El Acuerdo de París plantea un primer ciclo de acción a cinco años, comenzando en el 2020; un planteamiento al que estaría dispuesta a adaptarse la Unión Europea, que en principio planteaba objetivos a 10 años (hasta 2030).

4. El texto mantiene un objetivo de mitigación del cambio climático a largo plazo: 2050, y contempla la posibilidad de fijarse como objetivo que el mundo deje de usar combustibles fósiles para esa fecha.

5. La Unión Europea introdujo en el borrador la posibilidad de controlar las emisiones de gases de efecto invernadero de los sectores de la aviación y la navegación, algo que lleva persiguiendo cerca de tres años. El texto propone que los organismos marítimos y aéreos creen una especie de tasa de emisiones cuya recaudación vaya destinada a la adaptación de los países a las consecuencias del cambio climático.


(Foto portada: expoknews.com)


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