La brusca desaceleración del crecimiento de la economía peruana en 2014 se ha convertido en el arma preferida de la oposición para criticar al régimen de Humala. Esa arma es la que utilizó el fin de semana pasado, el exmandatario Alan García quien calificó la gestión del gobierno como “un quinquenio perdido”. 

García trazó su propia estadística y proyectó que este año, en el que se espera una recuperación, la economía apenas crecerá 3 por ciento. “No quiero ser pesimista, pero creo que con 3% podríamos darnos por satisfechos para culminar el gobierno de la “gran transformación”", ironizó el líder del Apra.

Los venablos de García, quien empieza a comportarse como el candidato de su partido para las presidenciales del próximo año, no se quedaron sin respuesta. Esta mañana, el ministro de Economía, Alonso Segura, ha refutado las cifras restándoles credibilidad técnica.

"Las expresiones del ex presidente García son absolutamente políticas, pues este Gobierno, por ejemplo, ha ejecutado más de 100,000 millones de soles en inversión pública, lo cual supera lo hecho en los gobiernos anteriores juntos, por lo que no sé a qué quinquenio perdido se puede referir". 

Pero la contraofensiva de Segura no quedó allí. Como García en la entrevista que publicó el fin de semana el diario El Comercio se ufanó de los presuntos logros sociales de su gobierno, el ministro de Economía aseveró que en la gestión aprista se exoneraron 1, 300 proyectos del SNIP, de los que “no tenemos idea si tenían rentabilidad social para todos los peruanos”.

Aunque no rebatió específicamente algunas de las cifras dadas por el exmandatario—por ejemplo que la pobreza se elevó en 0,6% y que la inversión privada prácticamente no creció en 2014— Segura ha explicado las razones para confiar en que la economía crecerá más de 5% este año, como proyecta el Gobierno.

Entre ellas figura la reactivación de algunos proyectos mineros (como los de Toromocho, Constancia y Las Bambas), una mayor inversión en gasto público mediante las APP (mencionó 22 proyectos sobre todo en educación y salud que se licitarán este año mediante Proinversión por un valor de 22 mil 800 millones de soles) y la caída en el precio internacional del petróleo, fenómeno que asegura impulsará medio punto en el producto debido a que las familias contarán con una mayor liquidez.

Además está por verse el impacto de las medidas que se dieron el año pasado para reactivar la economía. Por ahora más allá de la batahola política propia del inicio de una etapa electoral, desde el lado privado lo que hay es mucha prudencia.  

El informe de Resultados de Expectativas Económicas de la consultora Global Research Marketing (GRM) arrojó que el 40,5% de los empresarios encuestados en el 2014 consideran que la inversión de sus compañías será mayor este año. Sin embargo, el 79% piensa que la economía se expandirá menos del 5% oficial.

Panorama internacional

El panorama internacional para la región no es del todo auspicioso. El Banco Mundial ha presentado un informe en el que prevé un mayor crecimiento para América Latina en los próximos años (sube del pobre 0.8% en 2014 a 1,7% este 2015 y un más robusto 2,9% para el 2016 y aún uno mayor de 3,3% para el 2017). Sin embargo, la rebaja en sus proyecciones es considerable cuando se toma como referencia los estimados que hizo en junio del año pasado. 

"Antes de la crisis, el alza de las materias primas y la alta demanda externa hacían de viento de cola. El temor, como se dijo en la cumbre de otoño en Washington, es que esta tasa de crecimiento de entre el 2% y el 3% se convierta “en el nuevo normal” para la región a largo plazo. Jim Yong Kim, presidente del Banco Mundial, pide a los países en desarrollo que aprovechen la transferencia de la renta derivada del abaratamiento del petróleo de los países productores a los importadores para avanzar en las reformas estructurales e invertir los ahorros en programas sociales", indica un artículo de El País de España.