No sólo la canción criolla, sino la música peruana, en su conjunto, está de duelo, falleció el maestro Lucho Garland. Recordado por haber integrado Los Troveros Criollos, destacó por sus composiciones, el buen registro de su voz y por la excelente ejecución de la guitarra, al punto que hay quienes lo cuentan entre los más destacados instrumentistas.
LA HISTORIA DE LUCHO


lucho garland

Luis Francisco Garland Llosa nació el 10 de enero de 1930. Sus padres fueron Carlos Garland Higgingson y Selmira Llosa Vásquez. Estuvo emparentado con distintas personalidades como Antonio Garland –integrante del grupo cultural Colónida y primer director de Radio Nacional del Perú-, Mocha Graña Garland –diseñadora peruana- y el periodista Alejandro Miró-Quesada Garland –director del diario “El Comercio-”.

En 1952 fundó el dúo Los Troveros Criollos con el cantante Jorge Pérez. El 18 de julio de ese año obtuvieron el primer lugar del Concurso radial organizado por Radio América. A partir de entonces fueron contratados para participar tres veces por semana en audiciones en vivo de esa emisora, provocando largas colas del público deseoso de conocerlos. Tocaban temas de la guardia vieja como “El Parisien”.

Posteriormente, de 1952 a 1954, ya gozando de amplia popularidad, formaron una alianza artística con el compositor Mario Cavagnaro. Los temas de replana que hicieron causaron sensación y batieron todos los records de audiencia y venta de discos. Esos temas fueron escritos para ellos no sólo por Cavagnaro, sino también por Augusto Polo Campos.

Aunque autodidacta como guitarrista, él dio a conocer que empezó en la música criolla influenciado por los temas de la guardia vieja peruana. Dicen los críticos, que ello lo llevó a convertirse en uno de los más influyentes guitarristas del criollismo: su estilo iba de los solos de guitarra más criollos (con típicos trinos y repiqueos) hasta la introducción de armonías y acordes disonantes en el vals peruano.

Entre 1956 y 1962, formó y dirigió el trío Los Troveros Criollos -en su segunda etapa- junto con Humberto Pejovés y José “Pepe” Ladd. Se considera que esta fue la etapa más sobresaliente en términos cualitativos por la versatilidad del trío, alabada por destacados músicos y locutores peruanos. Su repertorio de clásicos es cantado por distintas generaciones. Entre ellos están los valses “Rosa té”, “El rosario de mi madre” y la marinera “Cuando esté bajo una loza”.

“El trío Los Troveros Criollos, de Lucho Garland, Humberto Pejovés y Pepe Ladd, fue en cuanto a armonía de voces y guitarras - a mi modesto parecer – el mejor trío criollo de todos los tiempos”, expresó Manuel Acosta Ojeda (2012).

La influencia de Garland en las siguientes generaciones de guitarristas criollos recién se está valorando en toda su dimensión. Aunque sus célebres introducciones y solos eran definidos como criollísimos, hoy se le valora también como el pionero de la armonía en la guitarra criolla.

Acompañó con su guitarra a la cantautora Alicia Maguiña en diversos conciertos y al actor y recitador Hudson Valdivia en el celebrado disco “Madre”. Como arreglista brilló colaborando con Chabuca Granda en su celebrado disco “Lo mejor de Chabuca Granda” y con el recordado director de orquesta Enrique Lynch, en la grabación del vals peruano “Recuerdos del ayer”, de la poetisa Amparo Baluarte.

EL GARLAND DE LOS CONOCEDORES
La anterior biografía y trayectoria destacada de Lucho Garland se ve confirmada por conocedores de nuestra música criolla.    


“La voz educada y varonil de Lucho Garland, su natural registro de barítono, su habitual simpatía; su virtuosismo en la guitarra; y sus modernísimos arreglos musicales, con un gran sentido de la armonía, sitúan nuestro vals criollo como arte cotizable y cotizado en el mercado internacional” opinó, en su momento, Nicomedes Santa Cruz (1953).

“Como guitarrista creó algunas de las más bellas introducciones de la canción criolla e introdujo en los años cincuenta las armonías y acordes disonantes a la guitarra criolla, que tan bien supo desarrollar otra gloria del criollismo, su colega el maestro Carlos Hayre” dice Pepe Ladd, hijo de José “Pepe” Ladd, integrante del trío Los Troveros Criollos.

“Como segunda voz de Los Troveros Criollos, en sus cinco conformaciones, estrenó joyas inolvidables como ‘Yo la quería Patita’, ‘Carretas aquí es el tono’, ‘Ay Raquel’, ‘La jarana de Colón’, ‘Te han visto por Orrantia’, ‘Vuelve pronto’, ‘Rosa Té’, ‘Puedes irte’, ‘Bajo una loza’, ‘Romance en la Parada’, ‘Prenda adorada’, ‘Caricia’, ‘Noche de amargura’ y muchas más. Como compositor, nos deja brillantes temas como ‘Agonía de amor’, ‘Serenata’, ‘Brindis por la vida’ (junto a Amparo Baluarte) y ‘Travesuras limeñas’ (con M. Sánchez y R. García Godos).

No se contentó con los éxitos comerciales de su primera etapa como integrante del dúo Los Troveros Criollos. Su indomable espíritu innovador lo llevó a formar el trío Los Troveros Criollos, con quienes alcanzó altos niveles de calidad armónica, tanto vocal como instrumental.

Don Lucho Garland introdujo a comienzo de los cincuenta las armonías y los acordes disonantes al vals peruano, manteniendo como pueden apreciar, su inconfundible toque criollo. En sus últimas apariciones esporádicas trató de adaptarse a los tiempos modernos, utilizando cajón o acoplando voces adicionales. Sin embargo los gustos ya habían cambiado y la generación a la cual perteneció cedía el terreno a las tendencias modernas con sus fusiones (vals baladizado, vals afroperuano o tropicalizado, vals jazzeado, etc), que ahora predominan. 

Habiendo sido uno de los pioneros en esta modernización, Lucho Garland nunca se quejó de los cambios, considerándolos necesarios. Nunca buscó las primeras planas, se mantuvo lejos del escándalo y el populismo. Su contribución a la música criolla es enorme, pero su influencia y su legado sólo serán apreciados en toda su dimensión por las futuras generaciones…”, concluye Ladd.

Primera y segunda Fotografías: Sitio Web de Los Troveros Criollos