Cinco de los 11 millones de migrantes indocumentados que residen en Estados Unidos tendrán estatus legal, podrán solicitar un permiso de trabajo de tres años y una protección de ser deportados. Así lo anunció ayer Barack Obama, al dar a conocer su plan de regularización por dos años. De esta manera, el presidente de ese país hizo real una de sus promesas electorales: favorecer a los migrantes. Aunque paradójicamente –como ya lo hemos comentado en LaMula.pe– la suya es la administración que más deportaciones ha llevado a cabo.
Según el Consulado del Perú en Washington, en EEUU viven 1.2 millones de peruanos, de los cuales el 30% estaría como irregular.
Obama señaló que “quien tenga niños que sean ciudadanos o residentes legales en EEUU podrán quedarse en el país si pagan sus impuestos legalmente”. Además, deberán demostrar que llevan en ese país desde antes del 1 de enero del 2010 y carecen de antecedentes criminales. "Sé que algunos de los críticos de esta medida la llaman amnistía. Bueno, no lo es. Amnistía es el sistema migratorio que tenemos actualmente, donde millones de personas viven aquí sin pagar sus impuestos o someterse a nuestras reglas, donde los políticos usan este asunto para asustar a los ciudadanos y buscar votos", subrayó Obama.
Cabe indicar que las medidas anunciadas no tendrán un camino fácil y se agudizará el enfrentamiento entre el Ejecutivo y el Legislativo. De hecho, los republicanos se han opuesto a esta iniciativa de Obama. Incluso el presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, afirma que lo que Obama busca es regularizar una práctica delictiva (que es el calificativo que la derecha de ese país suele dar a la migración indocumentada) y vulnerar la división de poderes en ese país mediante un recurso que excede el poder constitucional del presidente.
- el plan inmigratorio de obama
El 60% de los 11 millones de migrantes indocumentados vive en seis estados: California, Florida, Illinois, Nueva Jersey, Nueva York y Texas, según el Pew Research Center. Casi la mitad de ellos es de origen mexicano y la mitad vive en Estados Unidos desde hace más de 13 años.
Los aspirantes a los beneficios deben:
- Estar presentes en el territorio estadounidense desde hace al menos cinco años.
- Tener un hijo con ciudadanía estadounidense o residencia permanente (green card) , nacido antes del 20 de noviembre del 2014, sin importar su edad.
Trato especial a jóvenes
Los criterios de un programa creado en julio del 2012 especialmente para los inmigrantes que fueron traídos de niños por sus padres serán ampliados, lo que permitirá agregar 270,000 inmigrantes a los 600,000 que ya se beneficiaron del mismo, al 30 de junio pasado.
Los nuevos criterios son:
- Estar presentes en el territorio estadounidense desde el 1 de enero del 2010 (en vez del 15 de junio del 2007) .
- Queda eliminado el tope de edad de 31 años para acogerse al programa.
- Los solicitantes deben haber llegado a EEUU antes de los 16 años (invariable) .
- Las condiciones de diploma (bachillerato) y antecedentes criminales (no haber sido condenado) se mantienen.
Expulsiones
Las autoridades federales concentrarán sus recursos en expulsar a los indocumentados considerados peligrosos, detenidos en la frontera o que llegaron a partir del 1 de enero del 2014, incluidos menores de edad.
También serán destinados recursos para reforzar la frontera con México y al sistema judicial para acelerar el procesamiento de los casos de deportación.
Inmigración legal
El gobierno se prepara también para aumentar la entrega de visas para trabajadores muy calificados y estudiantes científicos, lo que podría abarcar unas 500.000 personas.
En particular, los extranjeros graduados en universidades estadounidenses de carreras en demanda (ciencia, ingeniería, matemáticas) podrán trabajar por más tiempo en EEUU tras obtener sus títulos sin tener que hacer trámites de visas, debido a la ampliación del programa Optional Practice Training.