Nunca pensé que vendría a Lima Los Planetas, la banda indie española más reconocida de los 90s. Su llegada a a ciudad ocurre en un buen momento en su trayectoria, ahora que anda más independiente de la indiependencia.  
ACERCÁNDONOS A LOS PLANETAS

La atención a la música contemporánea española creció en los 80 mucho más que en décadas anteriores. Las (entonces) nuevas generaciones nos interesamos por “la movida” y el rock radical vasco, por sus bandas de géneros y sub-géneros como el rock, el pop, el punk, el tecno-pop, que conocimos inicialmente gracias a revistas como “Rock de lux” –cuyos ejemplares llegaban de vez en cuando-, por algún avispado disc jockey radial –antes del boom del rock en español- o por algún conocedor que comercializaba o intercambiaba grabaciones en casete.   

El cambio de década de ‘80 a ‘90 fue duro. Tras el boom del "rock en español" -que hizo conocidas a bandas españolas “más comerciales”- se hizo un poco más complicado estar al tanto, aunque “La movida” y sus ecos resonaban aún con intensidad, y el RRV, el pop y el punk a la española ejercieron gran influencia en bandas latinoamericanas.    

Costaba abrirse a lo nuevo de la escena española, sobre todo si lo nuevo venía ¡en inglés!. Las propuestas de bandas que cantaban en inglés no calaron como las bandas ochenteras o las que vendrían después.

La nueva conexión con el panorama español, fue facilitada por publicaciones como “Zona de Obras”, las ediciones y reediciones en disco compacto de bandas españolas y el mundo (musical) que supuso la masificación del acceso a internet. Quienes empezamos a difundir música en medios a mitad de los 90, ya nos encontramos con ese panorama de “lo indie” en español. Y con Los Planetas a la cabeza.

Sellos discográficos que ahora cumplen 20 o 25 años –Javalina Música, Elefant Records, Munster Records, etc.- nos nutrían de nuevos sonidos. Este año bandas de algunos de esos sellos históricos han participado en un homenaje a Los Planetas, a propósito de los 20 años del lanzamiento de “Súper 8” - su álbum más aclamado por crítica y público, fuente de verdaderos himnos generacionales-. Se trata de “De viaje por Los Planetas” (editorial Ondas del Espacio), un libro con textos e ilustraciones sobre la banda. Hay otros dos libros sobre la banda: “Los Planetas, la verdadera historia”, de Jesús Llorente y “Una semana en el motor de un autobús, la historia del disco que casi acaba con Los Planetas”, de Nando Cruz.

ÓRBITA INDEPENDENTISTA

La banda empezó a inicios de los 90, no influenciados por “la movida”, ni por bandas españolas, sino por bandas de procedencia anglo, como los norteamericanos Mercury Rev -de la primera época- o los británicos Spacemen 3 y Joy Division. Era otra onda.

Con dos décadas de carrera a cuestas, declaran que “el hecho de intentar hacer buenos discos, buenas canciones y buenos conciertos es lo que nos mantiene vivos a lo largo de este tiempo”. 

Dado que su éxito y su amplia convocatoria podría confundirse con una orientación mainstream, ellos han debido marcar la distancia: “Siempre hemos ido a contracorriente, intentando hacer música para quienes conformaban pequeños círculos que con el tiempo fueron creciendo. No buscamos esa popularidad de estadio, ni sonar en emisoras comerciales, no nos interesa en absoluto. Nos sentimos un grupo más indie en el sentido de cómo vemos la vida”.

“Es cierto que cuando empezamos, en España el movimiento indie estaba naciendo y nosotros lo vivimos de primera mano, incluso dejando huella en todo ese fenómeno por la música que hemos hecho y por la visión que tuvimos”, han declarado para la prensa local.  

“¿Han inventado algo Los Planetas?”, se preguntaba un crítico español. “Si nos ponemos en plan analítico tampoco es que hayan inventado nada nuevo, tal vez ni siquiera en España… pero desde luego, al menos en mi opinión, revolucionaron el pop de guitarras en España. Y para bien, que de su generación son casi los únicos que aún siguen y bien vivos. Esas guitarras tan altas por encima de una voz tan bajita”.

LOS PLANETAS FUERA DE SU ÓRBITA

2007 fue el año en que la carrera de Los Planetas salió de su aparente cauce natural. Publicaron un álbum en el que su indie pop se encontró con el flamenco, el excelente “La leyenda del espacio”, título que parafraseaba al título del disco “La leyenda del tiempo”, editado en 1979 por Camarón de la Isla. Con él, obtuvieron el reconocimiento de “mejor disco nacional de rock alternativo de 2007” en los Premios de la Música organizados por la Academia de las Artes y las Ciencias de la Música.

Si bien no era lo primero que escuchábamos acá de experimentación entre músicas contemporáneas y folklore tradicional que viniera de España (Triana, Veneno y Pata Negra), en el caso de Los Planetas, el interés por el folklore de su país había empezado años antes, como ha dado a conocer Juan Rodríguez (Jota), vocalista de la banda:

“En 1998, después de grabar en New York el tercer disco de Los Planetas (Una semana en el motor de un autobús), regresamos a Granada contentos con lo grabado pero decepcionados con la escena neoyorkina. Nos parecieron cerrados, sin ningún interés en lo que viniera de afuera, prejuiciosos. Y eso era la escena indie, imagina el resto de la sociedad. Y yo confieso que quería entrar en esa escena, porque además el indie yankee siempre fue una influencia para nosotros, pero estando allá comencé a pensar en lo nuestro, en nuestra cultura y en que la habíamos dejado de lado y teníamos que recuperarla”. 

Una lección aprendida, sin duda, pero que les tomó tiempo asimilar.

Lo que ha aportado “La leyenda del espacio” es aún motivo de análisis. “El flamenco es un lenguaje diferente del rock, con sus propias pautas, metraje y dinámica. Y, en ese disco nos costó mucho trabajo asimilarlas, tanto a nosotros como al público”, evalúa Florent Muñoz (Guitarra).

“No queríamos hacer flamenco sino, simplemente, beber de unas influencias flamencas para llevarlas a nuestro terreno. Si yo hubiese tocado todo a 3/4 o hubiese metido divisiones de bulerías estaríamos haciendo fusión. ¡Y yo odio la fusión!”, dice Eric Jiménez (Batería). “Nuestro público es muy abierto, muy melómano, con inquietudes en el arte y en la cultura. Así que es mucho más probable que un seguidor nuestro tenga un disco de flamenco que un flamenco tenga un disco de Spacemen 3”, agrega Eric.

Hubo quienes pusieron las manos sobre sus cabezas cuando Los Planetas se atrevieron a mezclar rock y flamenco. Probablemente perdieron seguidores de los primeros tiempos, pero la banda persistió, fabricando en 2010 “Una ópera egipcia”, que marcó el reencuentro de dos importantes músicos que participaron del estupendo “Omega” (1996): el cantaor Enrique Morente y Antonio Arias, del grupo Lagartija Nick.

A la espera de un nuevo disco –han pasado ya cuatro años-, podemos ver este jueves en Lima a estos músicos residentes en su natal Granada (Andalucía), ciudad de la que, si bien conocemos pocos solistas y bandas, cada una de las que conocemos es significativa: Los Ángeles, Miguel Ríos, 091, Enrique Morente, Lori Meyers, y Niños Mutantes. Y, por cierto, ellos, Los Planetas.

La leyenda del espacio (2007, RCA - Sony BMG)

[foto de cabecera: punkbank.com]