Cada tres días, aproximadamente, una mujer boliviana es asesinada por su pareja sentimental. Esta información, brindada por el Centro de Información y Desarrollo de la Mujer (CIDEM), grafica la grave situación que enfrentan las mujeres en la sociedad boliviana. En lo que va del año, se han registrado 175 feminicidios.

Del mismo modo, la Organización Panamericana de la Salud, en un reciente informe, señala que más del 53% de mujeres, entre 15 y 49 años, declararon haber sufrido alguna forma de agresión física o sexual.

Pero eso no sería todo. De acuerdo con un reportaje de la agencia de noticias Deutsche Welle (DW), en Bolivia se han registrado varios casos de violación a menores de edad. Por ejemplo, en el municipio de Palos Blancos (La Paz) se encontró el cuerpo sin vida de un niña de apenas cuatro años. La menor había sido previamemente golpeada y violada. Días antes, se reportó que un enfermero de un centro de salud de Cochabamba abusó sexualmente de una niña de cinco años.

Ambos casos generaron indignación en la ciudadanía y autoridades públicas. Así, Rolando Villena, Defensor del Pueblo de Bolivia, demandó al gobierno que "declare un estado de alerta máxima en todo el país que genere una acción urgente y efectiva de prevención, protección y cuidado para combatir la violencia contra mujeres y niñas".

Justamente, el gobierno de Evo Morales aprobó, en marzo del año pasado, la Ley Integral para Garantizar una Vida Libre de Violencia, la misma que reconoce 17 formas de violencia y establece una pena de 30 años de prisión sin derecho a indulto por el delito de feminicidio. No obstante, la ley ha tenido poco impacto ¿La razón? El reglamento, necesario para liberar recursos económicos, recién se aprobó hace un mes. De esta forma, de las más de 17 mil denuncias que registró el CIDEM, apenas tres han recibido sentencia.

Por su parte, Lourdes Montero, Coordinadora de economía y equidad de Oxfam en Bolivia, señala que el problema del feminicidio no se va solucionar con dictámenes. Para ella, existe un marco social y cultural que debe ser combatido:"Mujeres de la edad de mi abuela o mi madre aún creen que es natural que el hombre tenga control sobre el cuerpo y la vida de una mujer".

Para luchar contra esta ola de abusos y feminicidios, se ha iniciado la campaña "Hasta que la muerte nos separe". Esta iniciativa quiere evitar que las mujeres que comienzan su vida sexual y afectiva eviten reproducir patrones machistas de conducta y, sobre todo, desterrar la idea absurda de que sus vidas les pertenecen a los varones.

Foto de portada: EFE

 

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