La música triste nos ayuda a superar momentos difíciles. Esta es una de las conclusiones a la cual ha llegado un estudio realizado por Liila Taruffi y Stefan Koelsch de la Universidad Libre de Berlín.

De esta manera, la música que evoca sentimientos 'trágicos' nos permite liberarnos de la desdicha producida por algún evento personal (como el fin de una relación o la pérdida de un ser querido). 

El estudio se realizó sobre una muestra de 772 personas, entre hombres y mujeres de diversos continentes (Asia, Europa y Norteamérica). Ellos tuvieron que contestar una encuesta de 76 preguntas que indagaban, entre otros aspectos, en las emociones que evocaban los participantes al momento de escuchar música triste.

Además de su efecto terapéutico, la investigación obtuvo otras importantes conclusiones. Por ejemplo, la capacidad para apreciar esta música aumenta cuando la persona enfrenta una situación angustiante. Asimismo, las personas que poseen alta empatía y baja estabilidad emocional son los más proclives a disfrutar esta música. 

Pero eso no es todo. Tal lo como lo señala Dan Ruderman en su análisis del estudio, resulta interesante constatar que la mayoría que recurre a este tipo de música lo hace cuando se siente nostálgico (76% de los encuestados) mas no triste ¿Cómo se explica esto? Los investigadores sugieren que cuando no existe un contexto desconsolador, las personas son capaces de disfrutar esta música porque les permite reflexionar sobre emociones pasadas sin la carga emocional negativa. Existiría, entonces, una función pedagógica.

Finalmente, Taruffi y Koelsch enfatizan que este estudio puede ayudar en el desarrollo de la musicoterapia ya que permite conocer las implicaciones de la música triste en la regulación de las emociones de los pacientes.