"Nunca podré escapar de mi pasado", señaló Shin Dong-hyuk hace dos años en una entrevista concedida a Aministía Internacional. Dong- hyuk es el único norcoreano nacido en cautiverio que ha logrado escapar del Estado totalitario fronterizo a Corea del Sur. Su fuga ocurrió en 2005.

Su experiencia ha sido recogida en el libro Escape from Camp 14 (Escape del campamento 14), donde se expone el trato degragante que el régimen da a sus prisioneros y las condiciones infrahumanas en las que viven.

En los años que siguieron a su huída, Don- hyuk se ha convertido en un defensor de los Derechos Humanos que lucha para que la comunidad internacional intervenga en su país. Su activismo lo llevó a fundar la organización Inside NK que tiene como objetivo crear conciencia sobre los innumerables abusos que comete el gobierno de Corea de Norte con sus ciudadanos.

Justamente, hoy publicó un artículo en la cadena de noticias CNN. En él recalca que el gobierno de Kim Jung-un utiliza tácticas diplomáticas para evitar que cualquier delegación internacional pueda viajar a Corea del Norte para inspeccionar los campos de prisioneros y hacer un informe sobre ellos:

"El régimen dictatorial norcoreano no solo debería negar sin fundamento que estos campos de prisioneros políticos existen. Si son verdaderamente honorables y justos, deberían permitir de inmediato que una delegación internacional de investigación, compuesta por mi persona y organizaciones como Amnistía Internacional, Human Rights Watch o las Naciones Unidas, pueda realizar visitas in-situ a los campos de prisioneros. Estas delegaciones deben incluir a presos políticos sobrevivientes como yo, y a otros opositores".

De igual manera, recalcó que el tema nuclear (que se discute en el Consejo de Seguridad de la ONU) debería tener la misma importancia que los Derechos Humanos. Así, demandó que la comunidad internacional se mantenga activa y atenta con respecto a lo que ocurre en Corea del Norte.