Después de que el estado de California despenalizara el consumo de marihuana, las tasas de criminalidad, el índice de expulsión de universidades y los casos de sobredosis han decrecido notablemente, reporta Christopher Ingraham en el diario norteamericano The Washington Post. 

Este escenario, ahora socialmente positivo, ha arrojado suficiente evidencia para probar que la reforma de la ley sobre el consumo de marihuana – usada como medicina alternativa en los hospitales de dicha ciudad-- no ha producido las consecuencias tan terribles que los detractores tenazmente pronosticaban.

De acuerdo al Center on Juvenile and Criminal Justice de California,

“La despenalización de la marihuana en California no ha tenido consecuencias dañinas para los adolescentes como, por ejemplo, un incremento en la tasa de crímenes, sobredosis, el manejo bajo la influencia de esta sustancia o la expulsión de universitarios. De hecho, después de la reforma, los jóvenes californianos muestran mejoras en todo tipo de situaciones de riesgo”

La siguiente tabla muestra que, luego del 2011, fecha en que se despenalizó la marihuana en California, ocurrió una disminución en los índices de riesgo entre adolescentes de entre 15 y 19 años (ver fuente original).

Caen los argumentos en contra de la despenalización

- Bajo rendimiento académico

Los detractores de la legalización sostienen que la marihuana podría causar un bajo rendimiento académico entre estudiantes universitarios. Sin embargo, la tabla anterior demuestra que la tasa de expulsiones universitarias (“School dropout rate”, según el cuadro) solo ha decrecido en comparación con el año previo a la despenalización (2010). Esto haría suponer que se le ha atribuido a la marihuana problemas que no se derivan necesariamente de su consumo. Como explican los autores del reporte:

“Debido a varias medidas adoptadas, el comportamiento de los adolescentes californianos, de hecho, solo ha mejorado dramáticamente después de la despenalización de la marihuana. Son mejoras que, en contraste, apenas ocurrieron en adultos de California y jóvenes de otras partes del país, en donde esta sustancia no ha sido despenalizada aún”.

- Estimulará el consumo de alcohol y otras sustancias alucinógenas

Este es otro argumento que, según las cifras del reporte, ha caído estrepitosamente. La tasa de muerte por sobredosis (“drug overdose deaths”) ha decrecido en un 20% en relación con los años previos a la despenalización. Igualmente, según el cuadro, el número de arrestos por adquisición de drogas (“drugs arrests”) ha disminuido en un 23% solo en el estado de California, mientras que en el resto de Estados Unidos, donde esta sustancia está penada por ley, solo ha disminuido en un 14%. Además, como escribe Ingraham:

“Aquellos estados de Norteamérica que usan la marihuana solo como una sustancia medicinal no han visto un gran incremento en el consumo de marihuana por adolescentes”.

- Incrementará el índice de accidentes de tráfico

En el estado de Colorado, donde la marihuana ha sido legalizada para fines recreativos y medicinales, se ha reportado una disminución del índice de accidentes de tráfico (ver aquí la noticia). Incluso si se admitiera que algunos consumidores conducen bajo los efectos de la droga, aun así se observa que los accidentes son cada vez menos frecuentes, ya que, como anota Ingraham

Es menos peligroso conducir bajo los efectos de la droga que del alcohol. Esto podría sugerir que algunos ciudadanos de Colorado están reemplazando el alcohol por la marihuana, en lugar de consumirlos conjuntamente.

Cabe aclarar que la despenalización de la posesión de marihuana en California, y la regulación del uso de la planta para fines médicos en dicho estado, no son los causantes de esta caída en las tasas de riesgo social. Lo que esto indica más bien es que las reformas de las políticas de drogas en California no han afectado negativamente la vida de los adolescentes estadounidenses, y eso se corrobora en los datos expuestos.