Mientras los asháninkas de la selva de Perú siguen denunciando que madereros ilegales amenazan sus vidas, la Dirección de Forestal y de Fauna Silvestre de Ucayali (DEFFS) incautó madera de presunta procedencia ilegal nada menos que en dos reconocidas cadenas comerciales de productos para el mejoramiento del hogar.
Se trata de las sucursales de las tiendas Maestro y Promart, ubicadas en la ciudad de Pucallpa, región Ucayali, donde según el titular del DEFFS, Marcial Pezo Armas, se incautó aproximadamente 10 mil pies de tablares de madera, valorizados en 35 mil soles.
“Hemos podido ver que en las maderas que venden existen indicios de huellas de motosierra. Eso está prohibido, aprovechar productos forestales con el uso de motosierra en el corte longitudinal. Y además de eso, no contaban con ningún tipo de documentación oficial que ampare este producto forestal. Eso hace ver que ha sido extraído en forma ilegal”, indicó Pezo Armas en declaraciones al diario El Comercio.
Según detalló el funcionario, en Promart incautaron 6 mil pies tablares de madera, valorizados en unos 20 mil soles. Mientras que en Maestro confiscaron 4 mil pies tablares, que equivaldrían a unos 15 mil soles. Las tiendas recibirían una multa equivalente al 10% del valor comercial de la madera, asimismo la policía y fiscalía deberán este delito ambiental.
La DEFFS de Ucayali incautó en lo que va del año al menos un millón de pies tablares de madera de procedencia ilegal en la región, valorizados en al menos un millón 800 mil nuevos soles.
Asháninkas en riesgo
El presidente de la Federación de Comunidades Nativas de Ucayali, Robert Guimaraes, denunció que ciudadanos brasileños, miembros de una colonia cercana al país, colaboran en territorio peruano con madereros ilegales.
Según Canal N, el dirigente indígena también denunció que persisten las amenazas de madereros ilegales contra las comunidades asháninkas de Ucayali.
Asimismo, el líder de la etnia cashibo-cacataibo, Washington Bolívar, indicó que desde hace varios años recibe amenazas por parte de madereros ilegales que operan en la región, por lo que solicitó garantías para su vida.
En setiembre, cuatro asháninkas de la comunidad nativa Alto Tamaya–Saweto, en la región Ucayali, fueron asesinados por madereros ilegales pese a las múltiples denuncias y pedidos que hicieron a las autoridades. Exigimos que no se vuelvan a repetir situaciones similares.
Foto: Inforegión
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