Luego que el Ministerio de Salud (Minsa) publicara el último sábado en el diario oficial El Peruano la Guía Técnica Nacional del Aborto Terapéutico, no demoraron en escucharse las voces de los principales opositores a la norma amparándose en creencias religiosas que no todos los peruanos están obligados a profesar.

Como era de esperarse, el cardenal Juan Luis Cipriani, fiel a su inacabable costumbre de inmiscuirse en lo que no le compete, salió al frente a insinuar que a la ministra de Salud, Midori de Habich, le espera una condena divina digna de las llamas más voraces del infierno.

"Hay una decisión que ha tomado la ministra de Salud. Personalmente, no quisiera estar en su pellejo, tarde o temprano estaremos delante de Dios, que juzgará con absoluta bondad y verdad las decisiones que tomemos", expresó en el púlpito radial que le acondiciona RPP todos los sábados.

Asimismo, señaló que De Habich ha aprobado una "guía de cómo matar a la criatura hasta las 22 semanas" y que "en muchos casos, esas criaturas podrían salvarse hasta con una cesárea". O sea, no solo se mete en lo que no le compete, sino que habla de lo que no conoce.

Pero el cardenal fue más allá: reveló que durante la campaña del 2011, Ollanta Humala y Nadine Heredia le prometieron que de llegar al Gobierno, no se aprobaría la legalización del aborto.

"El presidente Humala y su esposa Nadine, que estuvieron en mi casa, sí se comprometieron a que este tema no se aprobaría en su gobierno. Ahora pueden decir que es una parte simplemente terapéutica. No, en su gobierno se está aprobando esto", señaló. Claro, aquí no podríamos darle con palo, sino preguntarle a Humala, ¿quién era Juan Luis Cipriani para andar 'prometiéndole' qué medidas en materia de políticas públicas debían aprobarse o no en un gobierno?

Lourdes, la 'preocupada'

Y para que no se diga que solo son las cabezas de las iglesias las que se oponen a esta norma, Lourdes Flores, lideresa del Partido Popular Cristiano, se alineó a la postura de Cipriani y sorprendió con sus 'conocimientos médicos' en la materia.

"Con los avances de la ciencia, ahora son muy limitados los casos en los que se debe optar entre la vida de la madre y de la vida del niño (...)Tengamos mucho cuidado. Nosotros estamos del lado de la defensa de la vida, del lado de nuestra Iglesia", expresó.

¿No es curioso que los principales opositores mediáticos a la propuesta del aborto terapéutico e incluso en el aborto por violación, sean quienes nunca estarán en una situación tan difícil como esa? ¿Por qué no darle mayor crédito a una mujer cuya vida puede estar expuesta?

Con la entrada en vigencia de esta guía técnica todos los establecimientos de salud con un nivel de atención quirúrgica estarán obligados a aplicarla con el objetivo de estandarizar los procedimientos para la atención integral de la gestante, es decir cuando el aborto sea el único medio para salvar la vida de la esta o para evitar que un mal grave se apodere de su salud y pueda tener secuelas permanentes. Un gran paso en la protección de la vida de las mujeres y la revalidación de sus derechos, los mismos que se seguirán paseando por las lenguas de aquellos que pretenden mandar sobre sus cuerpos porque 'su iglesia' así lo dicta. 

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