Ante los 'oídos sordos' del Estado, el poco compromiso de la empresa Pluspetrol y la falta de atención de los grandes medios de comunicación, las comunidades indígenas asentadas en las cuencas de los ríos Pastaza, Tigre, Corrientes y Marañón, en la región Loreto, han iniciado movilizaciones pacíficas exigiendo al gobierno atención inmediata a la contaminación petrolera de sus territorios.

Más de mil indígenas quechuas están reunidos en Andoas (Cuenca del Pastaza) desde el 1 de junio. A ellos se han sumado integrantes de los pueblos kandoshi y achuar del Huasaga. En paralelo, los pueblos urarina, kichwa y kukama kukamiria han iniciado movilizaciones en las otras tres cuencas.

El presidente de la Federación Indígena Quechua del Pastaza (Fediquep), Aurelio Chino, comunicó el martes a la asamblea que hasta el momento no ha sostenido comunicación con representantes del gobierno e informó que “si en dos o tres días no hay ningún anuncio de las autoridades de alto nivel” tomarán medidas más drásticas. 

Las federaciones FEDIQUEP, ACODECOSPAT, FECONAT y FECONACO emitieron el 9 de junio un pronunciamiento donde dan cuenta de sus exigencias conjuntas para afrontar de forma inmediata la contaminación petrolera que daña el medio ambiente y pone en riesgo su salud. 

Los lotes petroleros 1AB y 8, ambos operados actualmente por Pluspetrol, son los más antiguos de la Amazonía peruana y se superponen a territorios indígenas de las cuatro cuencas loretanas. 

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