Madre - Manuel Acosta Ojeda

“Mareado escribí sobre la envoltura de una cajetilla de cigarrillos algunos versos para mi madre, que me había dado todo. Sentí pena y remordimiento. A las diez de la mañana, cuando terminé mi autoconfesión, fui a mi casa”, cuenta Manuel Acosta Ojeda. Era la víspera del día de la madre de 1951 y Manuel, el hijo, había dado forma a esta canción luego de una amanecida en el bar "El silletazo".

Madre, cuando recojas con tu frente mi beso todos los labios rojos, que en mi boca pecaron  huirán como sombras cuando se hace la luz. 

Madre, esas arrugas se formaron pensando ¿Dónde estará mi hijo, por qué no llegará?  Y por más que las bese no las podré borrar.

Cabellos blancos- Carmencita Lara

El hijo que ha partido y lejos e impedido de volver, le canta a su madre. Todo en la voz de la reina de las rocolas. 

Cabellos blancos lo de mi madre hilos de plata sagrados son  sus tersas manos me acariciaron  aquella tarde que me aleje  sus ojos tristes ay me miraban  cuando partia del dulce hogar

Una carta al cielo- Lucha Reyes

Nada más triste: el hijo sin madre. El "carita sucia" que roba hilo para hacer volar su cometa... y en su cometa una carta para hacerla llegar "hasta el azul del cielo/ allá donde se ha ido" su adorada mamá. Muy triste.Sobre la controversia de la autoría de este vals (¿es peruano? ¿es argentino?), sugiero este artículo del Dario Mejia, quien lo atribuye al trujillano Salvador Oda. 

Madre querida/ Manuelcha Prado  

Con el Violín de Andrés "Chimango" Lares y el Arpa de Jaime Kilka, Manuelcha Prado homenajea a la madre andina. "Madre querida/ madre adorada, por qué me has dejado/ en este mundo de vanidades, lloro mis penas y desventuras", como describe el propio Manuelcha, "un lamento desgarrado del hermano Virgilio Calle, por la madre que se fue". El tema hace parte de un disco dedicado a la Madre Andina, que incluye clasicazos (de la migración) como Expreso Puquio Pérez Albela.

Madre- MelcochitaMelcochita en su mejor dimensión: sonero. En este tema es el hijo que pasa una temporada en Canadá, y cuando por fin pisa la calle, va directo a casa de su vieja y... ya saben. Caminando por el cementerio, dijo estas palabras...

Apachido- Del Pueblo Del Barrio"Mi madre lavaba ollas/ en la casa de un señor/ y yo apachido a su espalda/ le escuchaba esa canción/ que hablaba de una traicionero amor que ella nunca olvidó". La madre de esta canción "aprendió a escribir en la nocturna, se fue a bailar al coliseo, se buscó una casa en el cerro y se hizo ambulante vendiendo en el suelo". Sin palabras, de la emoción.