Un grupo de investigadores de la Universidad de Hokkaido (Japón) ha descubierto cuatro especies distintas de insectos, aunque todos relacionados con el género Neotrogla, al interior de una cuevas en Brasil, cuyo rasgo más llamativo es que la hembra cuenta con un pene.

De hecho, otras especies animales intercambian roles sexuales, pero los Neotrogla son los primeros que muestran genitales del sexo opuesto. Este pene es un dispositivo que ingresa en el abdomen del macho y recibe ingentes cantidades de espermatozoides.

De acuerdo a las observaciones de los investigadores, el entorno en el que se hallan habría empujado a que el encuentro del macho con el hembra sea algo más que una mera transmisión de material seminal. Y es que la escasez de alimentos en las cuevas ha hecho que el semen sea muy nutritivo en su composición, por tal motivo, las hembras permanecen tanto tiempo fijadas a ellos a través de un mecanismo de espinas que se anclan en el interior del macho.

Pero no es la única característica llamativa de estos insectos. Su apareamiento es un proceso que toma entre 40 y 70 horas para concretarse exitosamente.

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