No todo acabó el 28 de febrero, cuando la empresa Mt. Gox se declaró en quiebra tras denunciar la desaparición de 850,000 bitcoins debido -supuestamente- al ingreso de hackers a su sistema. De ese monto, 750,000 pertenecían a sus clientes y lo demás a la empresa. 

Desde entonces ciudadanos, 'inversionistas', hackers y medios de comunicación han tratado con pinzas el tema. Y es que hay suspicacia, pues no han convencido los argumentos del francés Mark Karpeles, fundador de la compañía (una de las mayores plazas mundiales de bitcoins). Más aún cuando hace semana y media la firma anunció que encontró 200,000 bitcoins 'olvidadas' en una billetera digital. Con lo cual la cantidad global perdida es de 650,000 bitcoins (US$380 millones).

Después de este escándalo y con el propósito de regular su intercambio, el gobierno japonés aprobó hace poco una ley que designa a la moneda virtual simplemente como una mercancía y no como una divisa. Otros gobiernos se animarían a seguir la iniciativa.

Las investigaciones sobre la desaparición de las monedas tienen para rato, sobre todo si se considera que la quiebra de la firma no ha sido transparente. Y mientras sus clientes inician juicios con incertidumbre, lo más probable es que no recuperen sus fondos.

¿Cómo administró Mt. Gox las bitcoins? 

El Poder Judicial japonés ha iniciado pesquisas para resolver el misterio de tan repentina desaparición de las bitcoins. Lo cual será una tarea nada fácil porque rastros no hay.  De acuerdo con declaraciones de exempleados que recoge la agencia Reuters, el problema está en la manera en que Mt. Gox gestionó los fondos depositados por sus clientes. 

Según sus declaraciones, los fondos fueron utilizados para cubrir los gastos operativos y los planes de expansión de la empresa. Por ejemplo, se alquilaron costosísimas oficinas prime en Tokio y se adquirieron productos de última tecnología como un robot y una impresora 3D. Y, claro, Karpeles se compró un Honda Civic de última generación. 

Los empleados sospechaban que había un desvío de los fondos de los clientes. Cuando le preguntaron al francés, éste no dio especificaciones de cómo manejaba la cartera y mucho menos los convenció de que los depósitos estuvieran protegidos. Para colmo -o suerte de Karpeles- Mt. Gox no estaba sometida a ningún tipo de regulación, por lo cual no estaba obligada a dar mayor información interna ni externa. Ojo, también hay que recordar que desaparecieron US$27 millones en efectivo. 

Mientras continúan las invetigaciones, se ha reportado que las bitcoins robadas se comercializan en el mercado negro a través de Deep Web, lo que generaría que su precio caiga aparatosamente y pierda su atractivo (de hecho, bajó de US$946 a US$533 en cuestión de días). Por otro lado, hay quienes señalan que lo ocurrido con Mt. Gox ha generado desconfianza y esto sería un duro golpe para las bitcoins (que han creado discordia en el sistema financiero). Sin embargo, también están quienes aseguran que el precio se estabilizará y que 'el robo' no termina con estas monedas. ¿Quién tendrá la razón?

Para tomar en cuenta

Reuters hizo un recuento sobre el manejo de las monedas virtuales:

* Hacia 2012, y desde las oficinas del barrio tokiota Shibuya, Mt. Gox manejaba mensualmente alrededor de US$14 millones en intercambios (casi el 90% del comercio de la divisa virtual mundial en ese momento).

* Los únicos ingresos de MtGox provenían de la comisión que cobraba por cada transacción y que fue fijada inicialmente en el 0.6% del intercambio y que más adelante se redujo para transacciones de mayor tamaño.

* La contabilidad de la plataforma era complicada ya que incluía algunos ingresos en bitcoins, que utilizaba para cubrir algunos gastos, como la compra de material informático.

* En abril del 2013, cerca de US$20 millones fluían a través de la plataforma de intercambio cada día, de los que la compañía ingresaba US$300,000.

* Karpeles era la única persona en Mt. Gox con acceso a las cuentas bancarias, y cada petición de retirada de dinero se regulaba manualmente, lo que ralentizaba el proceso.

* En su declaración de bancarrota, Mt. Gox no proporcionó cuánto dinero quedaba en las cuentas bancarias, incluyendo el Mizuho Bank, que había sido su banco principal en Japón. Dijo que tenía 1.3 millones de comerciantes de bitcoins, unos US$55 millones según los depósitos.

* Los bitcoins se compran y venden en una red de persona a persona, independiente de un control central. Su valor subió con fuerza el año pasado a un total de cerca de US$7,000 millones.

* Mt. Gox perdió menos de lo anunciado al acogerse a la ley de quiebras japonesa el mes pasado, según documentos transmitidos a un tribunal de Tokio.

* La quiebra afecta a unos 127,000 usuarios.  

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