La paradoja de los auspicios. Las municipalidades de Magdalena del Mar, de Jesús María y de Pueblo Libre están entre los auspiciadores de la Gran Marcha por la Vida, "una fiesta donde se reúnen instituciones y personas que comparten la causa de la defensa de la vida del ser más indefenso de todos: el niño por nacer", como dice su propia página web.

Cierto es que el principal organizador es el Arzobispado de Lima, y tiene a un poderoso aliado que es el exministro de Salud, Luis Solari, quien declara que estar a favor del aborto es no ser civilizado. Más allá de los principios de defensa de la vida 'de principio a fin', hay una paradoja entre sus auspiciadores, y no parece ligera si uno lo piensa. Si uno 'guglea' "atraso menstrual+'distrito auspiciador'", la oferta que encontrarás ocupará varias páginas.

Sigue los siguientes enlaces para ver servicios de atraso menstrual en Jesús María, luego en Pueblo Libre, y, por último, en Magdalena del Mar. Quizá luego de ver eso, los que guíen la marcha tendrán que desviar el 'corso' hacia otro distrito, por una cuestión ideológica, pero en los otros distritos también se ofrecen esos servicios, así que no tendrían hacia dónde ir. Fin de la broma.

Atraso Menstrual es un eufemismo que se refiere a un servicio de aborto clandestino e inseguro. La Marcha va a transitar a lo largo de la avenida Brasil, cuyos postes lucen afiches que promocionan el servicio de aborto clandestino ('Atraso Menstrual'), como en muchas avenidas importantes de Lima. Que quede registro visual de ello. Porque el discurso y el pregón siempre se quedan cortos frente a la realidad.

Es un gran paso en el cuidado de la salud de las mujeres peruanas que la ministra de Salud, Midori de Habich, haya asegurado que este semestre se aprobará el protocolo del aborto terapéutico. Otro paso importante, y que está vinculado con la autonomía y voluntad de muchas mujeres, es el anteproyecto firmado por miles de personas presentado al JNE para garantizar el derecho de las mujeres que fueron violentadas sexualmente y quedaron embarazadas a decidir si continúan o no con la gestación.

La clandestinidad de los servicios de aborto ('Atraso Menstrual') expone a las mujeres a condiciones inseguras, riesgo en la intervención quirúrgica y estafas, aprovechándose de la desesperación, el desamparo, la falta de dinero y, claro, de la ilegalidad de la práctica . En el Perú, los consultorios de aborto clandestino son sinónimo de muerte materna, debido a los malos procedimientos de los médicos y supuestos médicos, quienes ocasionan hemorragias que no controlan, infecciones, y efecto negativos tras el uso de malas medicaciones.

Los gobiernos municipales de estos tres distritos están a favor de la vida desde la concepción y lo hacen a través de la gran Marcha por la Vida, pero no pueden velar por la seguridad y salud de las mujeres que asisten a los centros clandestinos de aborto en su propia jurisdicción, que los hay. Un saludo a la bandera.

Ver también:

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Hechos: "Restringir el aborto a un acto ilegal es feminicidio en masa"

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La esquina del atraso