Antes de su impresionante ascenso a la fama que lo colocaría, en la década de 1960, en el centro de la escena del arte pop mundial, Andy Warhol se ganaba la vida modestamente como diseñador gráfico. En esa época diseñó una gran cantidad de cubiertas de libros y portadas de discos, y algunos de estos ítems se han vuelto hasta clásicos sin que se sepa claramente quién estaba detrás de los diseños. Hoy les presentamos algunas de las portadas que realizó para diversos sellos discográficos de jazz como Prestige y Blue Note. 

Nótese que ya en esa época había un fuerte componente fetichista en su la producción de Warhol: la bella caligrafía que aparece en estas portadas no es la suya, sino la de su madre, que el joven artista enroló a menudo en sus primeros proyectos, hasta el punto que uno podría llegar a preguntarse cuál fue exactamente el aporte de Warhol en una portada como la del clásico disco de Thelonious Monk que aparece al inicio de este artículo. Precisamente la misma pregunta que nos podríamos hacer respecto a todo lo que hizo Warhol después. Qué loco.