Horas antes de que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, y el líder de la oposición, Henrique Capriles se vean las caras en una reunión del Consejo de Gobierno para conversar sobre los problemas del país, las calles de la capital, Caracas, amanecen cerradas a la espera de una nueva jornada de protestas contra el presidente, informa BBC. La espiral de violencia parece no encontrar su final en el drama venezolano y ya ha dejado 11 fallecidos, señala Efe.

Así, mediante una convocatoria en las redes sociales la oposición llamó a protestar nuevamente tanto por la liberación de estudiantes detenidos como por la del líder opositor Leopoldo López -quien se entregó voluntariamente a las autoridades el 18 de febrero-.

Recordemos que el viernes Maduro fue claro: “Ahí te espero, Capriles, ahí te espero, Henry Falcón (gobernador del estado Lara), ahí te espero, Liborio Guarulla (gobernador del estado Amazonas), no sigan rehuyendo su trabajo, ahí los espero para hablar de paz”, a lo que añadió que los tres líderes opositores “están enculillaos y no quieren venir a hablar conmigo”.  

Por su parte, Capriles ya confirmó su asistencia al palacio presidencial, aunque advirtió a Maduro que no aceptará "monólogos", en una reunión que considera no debe servir para "chantajear" ni para "tomar una foto como si nosotros estuviéramos defendiendo al Gobierno".

Sin embargo, quedan dudas sobre cuál será el resultado del encuentro. Néstor Luis Luengo, profesor de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) se pregunta si Maduro lo utilizará para "tomarse la foto de rigor y relanzar su imagen internacional", dañada por la represión contra las protestas, señala a El Tiempo. “Si el Gobierno no cambia su patrón de sectarismo, será solo para oxigenarse”, sostiene el académico. 

El analista político Fausto Masó sospecha que Maduro "quiere que esta reunión funcione para darle un alivio al Gobierno, que ahora sufre presiones internas y externas". Masó recuerda que el presidente decretó varios días no laborables, como carnavales y el 5 de marzo, primer aniversario de la muerte de Hugo Chávez. “En el fondo, la estrategia de Maduro para calmar las aguas no es la reunión, sino dar todos esos días libres”, sentencia.

Diálogo nacional

Paralelamente, el presidente, Nicolás Maduro, prepara un diálogo nacional para responder a la ola de protestas que no amainan, informa AFP. "Estoy convocando a la Conferencia Nacional por la Paz de Venezuela el miércoles, aquí también en el Palacio Presidencial", recordó Maduro en una entrevista transmitida por el canal estatal VTV.

"Para eso estoy convocando a todo el país a la Conferencia Nacional de Paz, para vernos a los ojos para reconocernos como venezolanos para decir: queremos paz, vamos a hacer la paz", dijo.

Maduro indicó que la responsabilidad de la paz en Venezuela no es sólo suya. El pueblo no se calma y las preocupaciones son creciente: Si el domingo centenares de chavistas se manifestaron en Caracas y fueron recibidos por Maduro, el resto de la capital seguía su ritmo ya casi habitual con altercados y protestas. 

"Es una conferencia nacional de paz la que voy a instalar el próximo miércoles con todos los sectores sociales, políticos, gremiales, religiosos", dijo Maduro este domingo ante simpatizantes.

General opositor amenaza con disparar si lo detienen

Con un fusil en la mano, el general retirado del Ejército venezolano Ángel Vivas se atrincheró hoy  en su casa, un día después de que Maduro, ordenara su detención por incitar a la violencia en las protestas contra el Gobierno. 

El presidente fue claro: "Vivas tomó armas contra la República y va a ser juzgado por eso", indicó y añadió que: "Por muchas armas que tome, más temprano que tarde yo le recomiendo: prepárese para que se entregue en paz", sentenció.

Se le acusa por "entrenar" a las personas que han bloqueado calles en la ciudad y que cruzaron cables en las barricadas, dejando resultados catastróficos como el impacto del motorista que murió degollado el viernes.

Vivas es un usuario muy activo en Twitter, donde denunció una supuesta penetración en las Fuerzas Armadas Bolivarianas de Venezuela de agentes cubanos. "Que Venezuela y el mundo lo sepa, cubanos junto a esbirros venezolanos atacan mi casa en Prados del Este Calle Maracaibo Qta Blanquizal", escribió hoy la red social. 

Así, según el El Universal, vecinos de la zona indicaron que unos 30 militares, con motos y vehículos, llegaron hoy a arrestar al exmilitar sin lograr su propósito.

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