Hagamos un poco de memoria e intentemos recordar alguna intervención notable de Cenaida Uribe en algún debate del Congreso en los más de siete años que lleva de parlamentaria. Deben haber existido pero nadie los recuerda. A estas alturas si uno escribe en el buscador de YouTube "Cenaida Uribe congreso", el único archivo que nos arroja dentro del hemiciclo es su segundo "sí, juro" del 2011. 

¿Será que a la parlamentaria oficialista no le va bien eso de argumentar y sustentar ideas de forma verbal? Pues a juzgar de la pobre defensa que dio ayer sobre la denuncia periodística en su contra que da cuenta que usó su cargo para favorecer a la empresa Punto Visual, todo parece indicar que sí.

En entrevista a RPP, Uribe Medina dijo que con ella no era la cosa. Que está 'indignada' y que tiene 'tan mala suerte' que siempre se cruza con gente a la que le gusta inventarse historias para perjudicarla. Lo cierto es que intentó defenderse con papelitos en mano pero evitó tocar el punto de quiebre de todo el caso: ¿Cuál es su relación con la empresa Punto Visual? ¿Tiene una relación con algún miembro del directorio de esta empresa?.

El exdirector del colegio Alfonso Ugarte, Lizandro Quispe, explicó en un reportaje el último domingo que la exvoleibolista llegó hasta su despacho el 1 de octubre del 2013 para exigirle que renovara el contrato que dicho centro educativo mantenía con la empresa por el alquiler de dos torres para paneles publicitarios. Al parecer, Quispe ya había decidido que no se haría dicha renovación puesto que por decreto cualquier tipo de contrato no debería tener una duración mayor a un año y las empresas favorecidas debían acceder a este mediante un concurso público. Punto visual tenía un contrato firmado desde 2006.

"Bueno, si no se firma el contrato de Punto visual te vas a acordar de mí, yo como sea te saco del cargo", es lo que según el exdirector la parlamentaria le habría dicho en tono amenazante, algo que otros dos testigos han ratificado.

"En ningún momento yo he ido a hablar sobre esta empresa, ni coaccionar al director, ni a obligarlo a renovar ningún contrato", se defendió Uribe aduciendo que el motivo de su visita -la que en un primer momento negó- fue ejercer su labor fiscalizadora a raíz de una serie de denuncias hechas por trabajadores del plantel en contra de Lizandro Quispe. Documentos que dan cuenta de faltas administrativas de tipo burocrático que, si bien merecen ser sancionados y revisados, no suponen ilícitos graves que ameriten la separación del cargo, más aún cuando muchos de estos ni siquiera se realizaron durante la gestión de Quispe al frente del colegio.

¿Cenaida Uribe ha 'fiscalizado' con la misma energía a las autoridades de otro centro educativo? ¿Ha mostrado la misma mano dura con otros directores? No lo sabemos, pero por lo menos otro testimonio da cuenta de otro ejercicio de presión por parte de la nacionalista para favorecer a la misma empresa.

Según la exsubdirectora del colegio Melitón Carbajal Maribel Sánchez Vargas, días antes de que Uribe acudiera al Alfonso Ugarte llegó hasta su plantel para "gestionar el tema de publicidad", aunque no contó con que otra empresa les pagaba aún más dinero por lo mismo. Esto la habría obligado a no insistir. 

"Ella no creía que esa empresa nos podía estar pagando tanto, incluso ella llamó a una gerente de la empresa Punto Visual (...) No nos extrañó pero sí nos incomodó", señaló a CanalN. Una nueva denuncia a la que Uribe respondió a través de su asesor -quizá curada del susto que supuso enfrentarse boca a boca con periodistas- diciendo que sí visitó el colegio, pero para entregar donaciones.

Pero todo nos hace volver al mismo punto: ¿por qué Cenaida Uribe vigilaría los intereses de Punto Visual? Pues todo apunta a que la razón sería la relación sentimental que mantiene con uno de los miembros del directorio. Según Perú21, el 'afortunado' sería Alberto Luis Azambuja Pásara, Gerente General de la empresa tal y como rezan los datos de la misma.

"Yo no mezclo mi trabajo con mi vida privada. No voy a hablar de ella", manifestó la congresista sin considerar que con este tipo de respuestas lo único que hace es confirmar que dicha relación existe, frente a lo cual estaríamos ante un caso escandaloso de conflicto de intereses. En este tipo de denuncias y situaciones, ¿debe considerarse la vida privada de los funcionarios públicos? ¿Cenaida Uribe puede exigir que no se toquen sus temas sentimentales si buscó favorecer a la empresa ligada a su pareja haciendo uso de su cargo?. 

Sin embargo, aunque en la entrevista negó tajantemente tener vínculo alguno con Punto Visual, lo cierto es que ya en agosto de 2009 la exvoleibolista fue criticada por la exposición de paneles con graves faltas ortográficas a cargo de la misma empresa. Errores que dijo asumir asegurando que los anuncios fueron producto de una 'donación'.

Pero 'buceando' en la cuenta de Facebook de la parlamentaria nos damos con otra sorpresa: una fotografía tomada con un teléfono celular que data del 17 de febrero del 2013 y que muestra un aviso del colegio "Palmeras School" que, según datos de Registros Públicos, pertenece a Uribe. Lo que llama la atención es que en la parte baja del mismo se ve que el panel también es obra de Punto Visual. Ya mucha casualidad, ¿no?

Y por si no queda claro que la mujer de rojo en la fotografía publicitaria es la misma exmatadora, aquí un aviso que evidencia su vínculo con la Institución extraído de la página en Facebook del plantel.

Cerca de la suspensión

Desde su partido ya han empezado a bajarle el dedo tímidamente, ya que reconocen que el caso es grave pero esperarán hasta que presente sus descargos ante la bancada para decidir si es o no suspendida.

"La denuncia es grave y se tiene que dar todas las explicaciones. No he conversado con ella, pero el caso tendrá que seguir los procedimientos habituales (...) Podría darse la suspensión, pero primero hay que escucharla", sostuvo el vocero de Gana Perú, Sergio Tejada.

Tras su pobre performance del martes en RPP, Uribe ha evitado a la prensa de todos los modos posibles prometiendo que responderá con ducumentos. ¿Esperamos? La Comisión de Ética tiene la última palabra.