Salve, Rey Camaleón

A pocos días de haberse celebrado su cumpleaños número 67, recordamos a David Bowie, el actor.

Víctor Ruiz Velazco I Redacción mulera

Publicado: 2014-01-24

Conocido como El Rey Camaleón, David Bowie (Londres, 8 de enero de 1947), es uno de los artistas pop más importantes surgidos en la segunda mitad del siglo XX. Su eclecticismo y constante experimentación y fusión de la música con otras artes como el teatro, la literatura y la pintura llevaron al glam rock a una verdadera edad dorada que tuvo como símbolo máximo a Ziggy Stardust: “La definitiva estrella del rock” que llega desde el espacio para prevenir a la humanidad que se encuentra cerca de la destrucción.

Este personaje interpretado por Bowie tuvo una corta pero memorable vida (1972-1973): “No me sorprendió que Ziggy Stardust fuera determinante en mi carrera, porque inventé una estrella rock de plástico completamente creíble”, declararía Bowie años después.

Ziggy Stardust sería, sin embargo, solo el primero de los muchos personajes que David Bowie interpretaría a lo largo de sus más de 50 años de vida artística; una vida artística asociada sobre todo a la música (136 millones de discos vendidos. Nueve discos de platino, once de oro y ocho de plata en el Reino Unido y cinco de platino y siete de oro en Estados Unidos. En 2004, la revista Rolling Stone lo situó en el puesto número 39 de su lista de los cien artistas de rock más importantes de todos los tiempos y en el 23 de su lista de los mejores cantantes de todos los tiempos), pero que incluye también una importante carrera actoral; ya que después de todo Bowie se formó en Teatro vanguardista y mimo bajo la dirección de Lindsay Kemp. Su incursión más destacada en el teatro se dio en The Elephant Man, una producción hecha en Broadway, por la que recibió el reconocimiento general.

Hoy queremos recordar algunas de sus participaciones en producciones cinematográficas, algunas de las cuales, estamos seguros, pasaron “desapercibidas” por usted debido a su facilidad para transformarse.

Finalmente cerramos esta nota con dos escenas memorables de películas en las que la música de Bowie cumple un rol fundamental:

Jareth el Rey de los Goblins

Laberinto (Jim Henson, 1986)