Permanecía castigado en el exterior del colegio junto a dos compañeros por haber llegado tarde a clase. El lunes, Aitzaz Hasan tenía una cita con su "destino". Así, mientras los escolares permanecían sentados en la entrada, llegó otro chico de unos 20 años que les dijo que estaba allí para pedir una solicitud de admisión en el centro. Fue entonces cuando los estudiantes se percataron de que el joven llevaba un detonador. 

Mientras dos de los muchachos corrieron asustados hacia el interior del reciento escolar, Aitizaz abrazó al suicida para detenerlo, lo que generó la fuerte explosión y terminó con la vida del joven. 

Ahora, Aitizaz de 15 años, originario de la pequeña ciudad chiita de Ibrahimzai, en la provincia de Jyber Panjtunjwa -al noroeste del país y provincia más afectada por los atentados de los talibanes-, es considerado un nuevo héroe. Y es que su acción evitó que murieran sus compañeros, pues el kamikaze se vio obligado a explotar a 150 metros del recinto, donde había unos mil estudiantes, según informó la policía local.

El padre del joven, Mujahid Alí, se mostró orgulloso por la acción de su hijo. "Mi hijo ha hecho llorar a su madre, pero evitó que miles de madres lloraran por sus hijos", afirmó. "Me encuentro listo para sacrificar también a mi segundo hijo por Pakistán. Hay un puñado de mártires en el mundo, ahora puedo decir que soy el padre de uno de ellos", añadió. 

El atentado ha sido reivindicado por Lashkar-e-Jhangvi, un grupo radical islámico suní causante de numerosas matanzas en el país contra fieles de la rama minoritaria chií - minoría musulmana que representa un 20% de los 180 millones de habitantes de Pakistán-, informa Efe. 

Ahora, jefe de policía de la provincia ha pedido a las autoridades que el joven reciba a título póstumo los más altos honores para un civil en el país.  "Aitzaz Hasan sacrificó su vida y detuvo al kamikaze con valor y valentía (...). Salvó la vida de cientos de estudiantes inocentes", destacó el oficial según AFP. 

Además, el héroe también ha recibido elogios de la prensa paquistaní, que ha comparado su valentía con la de la joven activista Malala Yousafzai, que sobrevivió a un ataque de los talibanes en el norte del país en 2012.

"No debemos olvidar nunca a Aitzaz y a quienes, como él -civiles y militares-, han sacrificado su vida en el combate contra los insurgentes", subrayó en un editorial el diario Dawn.

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