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7 Directores que nunca asistieron a una escuela de cine

Publicado: 2013-12-24

No queremos incentivar al abandono académico, no dejes la universidad, no. Hay quienes, en las disciplinas artísticas, dicen encontrar un dilema que nunca tendrá fin, la formación del artista. Se hace a sí mismo, libremente, mediante experiencias o se debe recurrir a la enseñanza e institucionalización.  

Sin duda, los profesores no solo aportan la teoría a sus clases, gran parte fundamental es la experiencia como profesionales la que da ese extra que el autodidacta no tiene. Hoy vamos a recordar a 7 Directores de cine que nunca se matricularon en una escuela y que se inmortalizaron con sus obras.


1. Quentin Tarantino

Probablemente lo único que estudio sobre cine fue como venderlo. Tarantino tomó clases de teatro cuando vivía en un barrio donde se mezclaban distintas culturas populares. Expuesto a una gran variedad de influencias cinematográficas, como la fiebre por las películas de Kung Fu. Abandonó la escuela en Harbor City para dedicarse, nuevamente, a seguir clases de actuación. Se puso a trabajar en un videoclub en Manhattan Beach donde devoró películas mientras las alquilaba. Por un gran tiempo antes de su primera obra maestra, se encerró a ver cuanta película pase por sus manos, de preferencia sobre mafia y delincuencia.

"Cuando la gente me pregunta si fui a la escuela de cine les digo, no, yo fui al cine". Declaraba Tarantino en referencia a la no asistencia a una escuela de cine.


2. Terry Gilliam 

Gilliam estudió Ciencias Políticas en el Colegio Occidental de California. En un principio era reconocido por sus animaciones surrealistas, donde recortaba fotografías. Caracterizó papeles secundarios mucho antes de ser director, se paseó por muchas áreas de la producción cinematográfica donde aprendió todo lo que sabe.

“La escuela de cine es para los tontos. Vive y aprende cómo hacer películas. No fuí a la escuela de cine. Tan solo miré películas en el cine. Y probablemente, mi mejor educación fue hacer películas, así que eso es todo lo que siempre diré: mira películas, coge una cámara y haz una peli. Y si lo haces las veces suficientes, eventualmente empezarás a aprender cómo se hacen las películas”.


3. Lana y Andy Wachowski

Los Wachowski se retiraron de la universidad a los dos años, incursionaron en la carpintería mientras escribían cómics para la Marvel. Escribiendo guiones es como logran su primera acreditación en Hollywood con la producción del guión de “Asesinos”, un thriller dirigido por Richard Donner que estaba protagonizado por Antonio Banderas y Sylvester Stallone. 



4. James Cameron

James Cameron mostró interés por la ciencia desde pequeño. Luego de ver Odisea en el Espacio de Kubrick quedó fascinado con el cine y la ciencia ficción. A los 15 años comenzó a buscar recrear efectos visuales con una cámara de 16mm. La magia visual era su máximo afán por el que con conocimientos mínimos realizó sus primeros pasos en el cine.


5. Christopher Nolan

Nolan empezó a realizar películas a los siete años con una cámara Súper 8 de su padre. Estudió literatura en Londres mientras realizaba cortometrajes por su cuenta. Su primer corto proyectado fue Tarantella, que fuera exhibido en Image Union, un festival de cine independiente.


6. Akira Kurosawa

Luego de una serie de tragedias familiares en las que su hermano mayor, quien hacia narraciones para películas mudas, se suicidara, Kurosawa fue contratado como trabajador de la escuela de Toho, ayudando al director Kajiro Yamamoto. Después de su debut tras las cámaras con Sanshiro Sugata (La leyenda del gran judo), sus siguientes películas fueron cuidadosamente supervisadas por el gobierno japonés, e incluyeron frecuentemente temas nacionalistas.



7. Stanley Kubrick

Desde muy joven se interesó por la fotografía, el jazz y el ajedrez. Durante su juventud asistía al cine Loew's Paradise y al Museo de Arte Moderno de Nueva York. Trabajaba haciendo fotografías sociales a grandes celebridades, trabajo que dejaría por dedicarse a realizar películas luego de considerar haber visto muchas malas propuestas visuales. Cuando Kubrick aún concedía entrevistas, se refería a Max Ophüls y Sergéi Eisenstein como sus dos referencias cinematográficas más influyentes, el primero por su trabajo con la cámara, y el segundo por su técnica de montaje.

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Redacción mulera

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