#ElPerúQueQueremos

Mírame que soy bonita

Una campaña publicitaria de Dove buscar demostrar a las mujeres que son más bellas de lo que piensan.

Publicado: 2013-11-29

Todo depende del color con que se mire. La confianza en uno mismo no debería depender de qué tan atractivas nos encuentran otras personas. Sin embargo, en una sociedad donde la belleza es una de las obsesiones que está más presente, sentirse fuera de los patrones considerados como "lo atractivo" es más común de lo que parece. Los estímulos llegan de todas las direcciones: los medios de comunicación, las revistas o los carteles publicitarios que invitan a uno a mostrar preferencia por rostros, muchas veces sin personalidad alguna. 

La marca Dove, de Unilever, ha lanzado un proyecto que se denomina como "experimento social ". La multinacional seleccionó a varias mujeres que, sin saber exactamente qué tendrían que hacer, llegaron a un edificio donde nunca habían estado. Allí se sentaron  junto a un retratista forense profesional que, de espaldas a ellos y separados por una cortina que impedía contacto visual, les pidió que hablaran brevemente sobre su apariencia y rasgos de su rostro. Mientras, el artista dibujaba un boceto de la descripción. 

Posteriormente se invitaba a un desconocido, que previamente había mantenido una conversación con esa mujer, a describir a la participante según recordaba. El dibujante realizaba un nuevo boceto con la nueva descripción.

Al final, cada mujer regresó a ver a los dos bocetos, y se dio cuenta de las diferencias entre la forma en que se describe a sí misma y cómo otros la describen. En la mayoría de los casos, estas se ven más bellas cuando se describe por parte de desconocidos. "Usted es más bella de lo que piensa ", sentencia el video.

Sin embargo, a pesar de que estas situaciones son más comunes de lo que pensamos, el comercial nos muestra un concepto de "belleza" totalmente enfocado en lo físico. ¿No es importante otro tipo de cualidades? De hecho parece que Dove nos quiere recordar lo importante que es saber que debemos ajustamos a nivel de atractivo de la sociedad. Queda reflejado en el testimonio que acompaña el comercial: "Debería estar más agradecida de su belleza natural. Afecta a las oportunidades y los amigos que hacemos, a los puestos de trabajo que vamos a tener, a la forma de tratar a nuestros hijos, impacta en todo. No podría ser más importante para su felicidad".

Es preocupante que lo hermosa que pueda llegar a ser una mujer afecte en todos los ámbitos de nuestra vida, tanto en las relaciones personales como en la carrera profesional. Al parecer "ser bella" es requisito indispensable para su felicidad. Para rematar,  es una belleza física y superficial que integraría la parte más importante de lo que podría ser uno mismo. ¿Cuándo romperemos este patrón?


Escrito por

Tamara Lasheras

Politóloga, amante de la música y el buen vino. Buscando formas distintas pero posibles de hacer las cosas.


Publicado en

Redacción mulera

Aquí se publican las noticias del equipo de redacción de @lamula, que también se encarga de difundir las mejores notas de la comunidad.