Sigue la polémica tras la elecciones de Honduras. Aunque todo parece indicar que las presidenciales dieron el triunfo al oficialista Juan Orlando Hernández, hasta que Tribunal Supremo Electoral (TSE) presente una "declaratoria oficial" del vencedor, los resultados no son definitivos. 

Xiomara Castro, exprimera dama y presidenciable por el partido de izquierda Libertad y Refundación, se declaró presidenta electa al cierre de urnas el domingo pese a que momentos después, el primer escrutinio del Tribunal lo negara. Ahora, con el 75% de los votos contados, el candidato oficialista sería finalmente el ganador -Hernández obtuvo el 35,26% del apoyo, mientras que Castro alcanzó el 29,14%-. 

Desde el domingo, Libertad y Refundación ha hablado de fraude, destacando la existencia de supuestas irregularidades en el 20% de actas electorales que no habrían sido revisadas y que, podrían representar unos 400,000 votos a favor de Castro.

"Si las pruebas que estamos recolectando a nivel nacional comprueban fallas masivas en el proceso, nosotros lo vamos a denunciar y los vamos a impugnar", dijo el expresidente Manuel Zelaya, esposo de Castro el miércoles, a lo que añadió a Efe que "si por el contrario nos demuestran las mismas actas que no ha habido masivamente ese problema, también lo vamos a decir". 

Un "informe final" sobre el asunto será presentado mañana por Castro, confirmó Zelaya, derrocado en junio de 2009. Aun así, su esposa ya reconoció que estarán el Congreso como segunda fuerza. “Haremos oposición”, aclaró. 

Por su parte, las misiones de observación electoral de la Organización de Estados Americanos y de la Unión Europea reconocieron que en las polémicas elecciones hubo una “campaña opaca y desigual”, además de “incidencias e irregularidades” aunque el proceso había sido “transparente".

Estas elecciones han sido un intento de cicatrizar la herida del golpe de estado. La formaciones dan esperanza de un cambio en la república con el bipartidismo. Así, los comicios contaron por primera vez nueve partidos políticos, cuatro de surgidos tras el golpe de Estado.