Han pasado solo semanas desde que el cardenal Juan Luis Cipriani se rasgara la sotana y exigiera que no se haga leña del árbol caído en torno al escándalo del exobispo auxiliar de Ayacucho Gabino Miranda, señalado como el autor de delitos de pedofilia.  

Hoy, para mala suerte de Cipriani y sus seguidores, un nuevo caso de abuso sexual a menores envuelve a la Iglesia Católica sin que -oh, casualidad-, sus jerarcas lo condenen públicamente.

El sacerdote Luis Alejandro Bazalar García fue denunciado por violar a un adolescente de 17 años de edad también en Ayacucho. El hecho fue dado a concoer por la tía de la víctima, Magaly de la Cruz, quien además denunció que el cura intento llevarse al menor hacia otro lugar el último miércoles, tras enterarse que los exámenes médicos a los que fue sometido confirmaban el delito.

Según contó a RPP, el joven era seminarista hasta hace pocos meses, cuando Bazalar solicitó que se retirase de dicha actividad. Denunció también que el cura lo habría inducido al suicidio, provocando que se cortara las venas. El menos se encuentra internado en un hospital de la ciudad.

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