El reconocido director de cine e integrante del Comité Consultivo del 17 Festival de Cine de Lima, Francisco Lombardi, saludó que existan festivales de cine alternativos al que organiza, puesto que aumenta las oportunidades para los amantes del cine de disfrutar de películas a las que no es fácil acceder.

"Mientras más haya, mejor", señala en una entrevista que le hizo La República, zanjando así la controversia que surgió cuando el director del Festival de Cine que organiza la Universidad Católica, Edgar Saba, señaló que el Festival de Cine Lima Independiente confunde a los espectadores.

Por otro lado, Lombardi dio a entender que no es utópico pensar que Quentin Tarantino llegue a nuestro país para futuras ediciones del festival de cine -como muchos creen- , ya que este año se logró tener como invitado al destacado director de cine independiente Alexander Payne, quien estuvo en la inauguración del viernes. 

Estos planes de invitar a los hermanos Coen, Spike Lee o Paul Thomas Anderson, según el director, se piensan con la idea de dar a conocer a exponentes del cine independiente americano, ya que 'muchos están vinculados a Hollywood y aun resulta difícil distinguirlos'.

No todo es Asu Mare

Aunque Lombardi considera positivo que películas peruanas como Asu Mare hayan tenido un apoteósico éxito de taquilla, lamentó que el romance se haya perdido de pronto, ya que -anteriormente- se han hecho excelentes películas con temas duros, 'de gran éxito comercial y no con el único objetivo de entretener'.

Su hija estuvo en la producción de ¡Asu Mare! y Lombardi conoce las estrategias que se usaron para realizar la película, por ejemplo, focus groups, con lo cual él considera que no es posible estimar el éxito verdadero que tendrá la película. Por eso, afirma que las obras que él ha dirigido han sido para él mismo y para personas cuyas opiniones considera valiosas.

Lombardi habla de dos tipos de cine: el cine de autor y el comercial. Considera que películas como ¡Asu Mare! no tendrían por qué recibir apoyo del Estado, ya que se ha visto resultados positivos sin su intervención. Por otro lado, las películas que reflejen expresiones personales y exploren el lado artístico 'que es lo que hace que el cine tenga la dimensión expresiva que tiene y que lo lleve a ser comparado con la literatura y las grandes artes', sí deberían recibir apoyo del Estado, ya que usualmente no llegan a generar un público que las siga.

En resumen, afirma que él le otorga -cada vez- más valor al lado artístico de una obra cinematográfica que a lo masivo, al espectáculo, y que 'si solamente nos dedicamos a hacer películas como ¡Asu mare!, el cine peruano no va a crecer'.