Desde el 1 de enero del 2012, la venta de agua en botellas de plástico de menos de un litro está prohibida en Concord, una pequeña ciudad al noreste de Estados unidos, bajo penas de multa de hasta 50 dólares, según un decreto municipal promulgado por el fiscal de Massachusetts el pasado setiembre.

Aquellos que incumplan la regla por primera vez recibirán una advertencia y los que se sean encontrados vendiendo las botellas prohibidas por segunda vez serán multados con 25 dólares, las siguientes faltas a la norma serán sancionadas con $50.

La prohibición fue impulsada durante tres años por una octogenaria que vive en esta pequeña ciudad de 16.000 habitantes. Jean Hill, de 84 años, recibió el respaldo del movimiento Ban the bottle ('Prohíbe las botellas') que denuncia la contaminación creada por las botellas de plástico que en muchos casos no son recicladas.

"Los comerciantes de agua embotellada secan nuestros acuíferos y nos los revenden", explicó Hill en 2010 al diario The New York Times. "Lucharé hasta el final", añadió está abuela sensibilizada con el problema de las botellas de plástico gracias a su nieto de 10 años, que le habló sobre la placa de desechos del Pacífico.

Pese al entusiasmo que la medida ha despertado entre los preocupados por el medio ambiente, el decreto establece, que la medida puede ser suspendida si su puesta en marcha resulta ser demasiado costosa.

Según el movimiento "Ban the bottle" (que también está presente en YouTube), los estadounidenses consumieron 50.000 millones de botellas pequeñas de plástico en 2007. "Con una tasa de reciclaje de solamente un 23%, 38.000 millones terminaron en vertederos", añadió.

Fuentes: AFP, BBC