El Banco Mundial advirtió que América Latina y el Caribe deben reforzar la alimentación de madres y niños menores de 2 años para reducir las "elevadas tasas de desnutrición".

La institución resaltó que los planes regionales para el desarrollo, en especial en tiempos de crisis económica o tras desastres naturales, pueden dañar el capital humano, pues "pasan por alto las necesidades de las madres y los niños más pequeños".

Marie Chantal Messier, especialista del BM, explicó en el estudio "Cómo proteger la nutrición de las madres y los niños"  que la inversión en nutrición era necesaria y tenía sentido económico, pues los primeros días de vida son básicos para el desarrollo del niño.

"Si el estatus nutricional no es bueno en los primeros mil días de vida, vamos a ver daños irreversibles en las personas, que van a mantener a los madres y los niños en un nivel de desarrollo pobre", declaró en una entrevista a la agencia EFE.

Como respaldo del estudio, se presentan cifras que indican que 47 millones de personas en América Latina padecen hambre, y la desnutrición ocasiona que los países pierdan entre 2 y 3%  del producto bruto interno.