El Tribunal Constitucional (TC) declaró fundada la demanda de hábeas corpus interpuesta por la comunidad nativa Tres Islas, que instaló una caseta de control para impedir el ingreso de taladores ilegales a su territorio. La medida del TC ordena que cesen los actos de violación del territorio de la propiedad comunal y anula el hábeas corpus emitido por la Sala de Apelaciones de la Corte Superior de Madre de Dios que permitía el ingreso de extraños al territorio de la comunidad.

El artículo 89° de la Constitución señala que las comunidades nativas pueden disponer y hacer uso de sus territorios. Sin embargo, según especialistas, este fallo constitucional representa el primer pronunciamiento de un órgano jurisdiccional nacional sobre el tema de la autodeterminación indígena. Lo anterior reconoce que poder decidir qué foráneo ingresa o no a un territorio es un derecho fundamental consuetudinario y no una pretensión separatista o secesionista.

Haciendo uso de su autonomía, la Comunidad Nativa Tres Islas decidió impedir el ingreso de personas extrañas a su territorio debido a que desde hace algununos años su territorio viene siendo afectado por el ingreso de taladores ilegales que deforestan la zona. Igulamente, la actividad de minería artesanal que venían desarrollando personas no autorizadas por la comunidad, sin control medioambiental ni fiscalización alguna, ocasionó el deterioro del medio ambiente, la muerte de aguajales, plantas, peces, aves y animales del monte.

Cabe mencionar que según señala la sentencia del Tribunal Constitucional la decisión de la comunidad fue ignorada anteriormente por el Poder Judicial y también por la Policía Nacional y el Ministerio Público. Incluso las últimas entidades iniciaron investigaciones a las autoridades de la comunidad nativa.

Fuente: Web TC, Servindi