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I, pet goat II: animación sobre conspiración y el despertar cósmico

Publicado: 2012-07-04

“I, pet goat II” es un cortometraje de animación que muestra aspectos y acontecimientos importantes de la sociedad en que vivimos desde una óptica muy interesante. El título de la obra se debe al cuento infantil "The pet goat", conocido por ser el cuento que leía George W. Bush cuando fue informado de los atentados del 11 de septiembre de 2001. En ese sentido, el corto peforma una mirada crítica y surrealista de los eventos que sacudieron el mundo la pasada década.

Con sede en Montreal, Canadá, Heliofant es un estudio independiente animación centrado en la creación de contenido experimental. En esta, su última creación, plantea un discurso cargado de símbolos que trazan un viaje iniciático de muerte y renacimiento hacia el Nuevo Sol de la conciencia. Según un artículo de Pijamasurf, "sus imágenes multidimensionales que nos hablan en diferentes planos de significado. Conciencia política que se convierte en chamanismo, en sanación colectiva de una profusa herida secreta".

La animación nos sitúa en un teatro masónico –con ecos de aquel espacio interdimensional del final de Twin Peaks o la mente del Dr. Parnassus– sólo que estamos en un salón de clases en Florida, el 11 de septiembre del 2001, en el que George W. Bush está enseñando a leer a un grupo de alumnos afroamericanos, usando el libro "The Pet Goat". Esto en realidad sucedió y de manera "sincromísticamente" extraña los niños repetían, como un mantra pedagógico las palabras : “kite”, “hit”, “plane”, “steel”, “must”. Las cuales pueden ser ordenadas para decir “kite-plane must hit steel” (avión-cometa debe golpear acero). Por supuesto Bush es también la cabra mascota, nosotros también somos la cabra mascota, I, Pet Goat, (cabra asociada con el diablo pero también con Pan, el dios-animal que libera el instinto en el éxtasis del cuerpo); en un giro del titiritero, Bush se convierte en Obama y entramos a una interpretación psicomágica/conspiranóica de lo que hay detrás de los acontecimientos políticos que dieron forma a los últimos años. Según el estudio candiense responsable de esta animación: “una historia sobre el fuego en el corazón del sufrimiento”// la manzana de Eris es el loto.

Las torres se derriban en un ceniciento archipiélago, el ritual de magia negra inicia, vislumbramos los tronos del poder secreto, el control mediático extraterrestre, la programación mental, la hechicería global y arribamos al Ser planetario, simbolizado en el Cristo Zombi-/Cristo Cósmico. Es un festival de magia en el que danzan fuerzas opositorias, arquetipos, personajes de un drama épico de muerte y renaciemiento, un viaje iniciático, cruzando el río de Anubis, la historia mística de la humanidad, las cuevas como el cuerpo de la Tierra y las cámaras de los antiguos misterios, la falocracia que aprisiona el despertar del erotismo salvaje de la diosa madre y que eleva al hombre a su vuelo astral, conectando los cordones de su ADN en un cohete-colibrí de la espiral sagrada, el fuego del cosmos, el nagual, el fuego en el agua, el tercer ojo que se abre en la mente de I, Christ, la vieja civilización se derrumba y avanzamos hacia el Sol Nuevo que emite rayos de conciencia.

Desde Montreal, Heliofant, “aquel que muestra o trae consigo al Sol”, ha creado una brillante animación, tanto técnicamente como en un plano simbólico, el lenguaje de los sueños, el lenguaje del poder y de la magia. Usando el flujo de la música de Tinoki Project, “Stream”, para incrustar imágenes multidimensionales que nos hablan en diferentes planos de significado. Conciencia política que se convierte en chamanismo, en sanación colectiva de una profusa herida secreta. Un microproyecto de evolución, de escape de la Matrix a través del ritual de la imagen.


Escrito por

Lee Torres Calderon

Fotógrafo y videasta. Missing wanderlust. @amilkywaytrip


Publicado en

Redacción mulera

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