El parlamentario aprista, Mauricio Mulder, señaló en una entrevista concedida a Diario 16 que el partido necesita un relanzamiento con nuevos liderazgos. Además pidió a la cúpula que piensen en el APRA antes que en las pretensiones personales.

El legislador aseguró que se debe asumir la responsabilidad del fracaso electoral en las últimas elecciones presidenciales.

La entrevista a continuación:

-Las bases apristas están molestas con la cúpula y exigen a gritos una inmediata reorganización de su partido. ¿Qué está pasando?

Durante las visitas que he hecho a las bases, he recogido el reclamo de los compañeros por la postergación del Congreso Nacional y su dilatación. Y cuando se ha dado respuestas de que hay temas administrativos y de padrón, no han quedado satisfechos. Pero ahora resulta que los líderes cuestionados quieren sacar a los dirigentes de bases. Eso ha generado esa reacción.

-Es una reacción lógica

Sí. Y si bien es cierto que hay que ir hacia el recambio, primero hay que comenzar por los que tienen responsabilidad política y no que ellos cambien a todos. De ser así, ellos, que manejan los padrones y las elecciones internas, pondrán a sus incondicionales y amarrarán el congreso. Eso es lo que temen las bases. Hay que cambiar de arriba para abajo y no al revés.

-Usted está de acuerdo, entonces, con el recambio de los principales líderes apristas.

Pero, por supuesto. Y lo dije por escrito al día siguiente de las elecciones generales del 10 de abril, donde manifesté mi renuncia a integrar la Comisión Política, tras considerar que todos teníamos una responsabilidad. El Comité Ejecutivo Nacional dejó sus cargos a disposición, pero eso fue un saludo a la bandera porque siguen sesionando y tomando decisiones.

-Los apristas de Surco, Lince, Jesús María y hasta de Carabayllo no quieren que los líderes que casi hicieron perder al APRA su categoría de partido político sigan en sus cargos.

Sí pues, y estos siguen en la conducción partidaria y quieren reorganizar a las bases. Están entrando a un terreno bastante complicado. El APRA necesita una recomposición y un relanzamiento urgente.

-También se quejan de la existencia de grupos o ‘ismos’ (alanismo, jorgismo, mechismo, cuarentones) en el APRA…

Las campañas internas y el voto preferencial siempre llevan a que cada dirigente tenga seguidores. Pero es nocivo considerar que deben manejarse las cosas en función de esas tendencias. Después de las elecciones generales he sido un militante de base y desfilé con la Confederación de Trabajadores del Perú, el Día de la Fraternidad. No subí al estrado porque no soy dirigente nacional, así que escuché el mitin desde abajo.

-No tendrá cargo, pero es un líder del APRA…

Los liderazgos los lleva uno. El cargo no hace al líder ni el líder hace al cargo. Además, habrán algunos que teniendo cargos ahí (en el APRA), no son líderes.

-¿Y por qué cree usted que Jorge del Castillo, Javier Velásquez Quesquén, Omar Quezada y Carlos Arana se aferran a sus cargos?

No quiero especular, pero es importante que políticamente asumamos esa responsabilidad y nos demos cuenta de que necesitamos relanzar al partido con nuevos liderazgos. Eso no significa que nos vayamos a nuestras casas ni que tampoco entren ahora solo jóvenes, sino las personas que en los últimos diez años no hemos tenido la responsabilidad de la conducción directa del partido.

-Hay responsabilidades en las elecciones municipales y generales, y también de que hoy tengan solo cuatro representantes en el Legislativo.

Nos hemos reducido a esa expresión por la incapacidad que hubo de la alta dirigencia del partido de fortalecer la candidatura presidencial de Mercedes Aráoz, quien luego fue atacada por su propio secretario general (Jorge del Castillo). Eso es una responsabilidad que hay que asumirla. Lo contrario solo dificultará la capacidad de convocatoria.

-¿Qué invocación le haría a la actual cúpula aprista?

Que primero está el APRA y luego nuestra pretensión personal. Que piensen que ninguno de nosotros somos los salvadores o únicos conductores del partido. El propio Víctor Raúl Haya de la Torre decía que el APRA era más que él.

-Y en toda esta reorganización, ¿cuál es el papel de Alan García?

Él tiene un notorio liderazgo dentro del APRA y una gran aceptación, pero tampoco debemos esperar que la inmadurez de los demás líderes para resolver sus propios problemas sea resuelta por un dictado de arriba.