En un país donde se hace lo posible para que se olvide lo que sucedió en los años de la violencia política, algunas personas buscan maneras distintas de generar memoria, conciencia y sobretodo, afán de conocer la verdad. Jesús Cossio, recurre a la historieta como un arma frente al olvido y la impunidad, LaMula.pe conversó con el a propósito del debate sobre memoria de las últimas semanas.

Cossio es coautor de Rupay y autor de Barbarie, cómics en los que se ficcionalizan pasajes del informe de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación entre los años 1980 y 1990. Historietas en los que la fuerza de un dibujo expresivo y unos diálogos coherentes, nos ponen como testigos de muchas de las violaciones a los derechos humanos cometidas por terroristas y fuerzas del orden. Historias frente a las cuales es imposible mantenerse indiferentes.

Como suele suceder en estos casos, el autor fue blanco de muchas críticas por haber retratado también los crímenes de malos militares y policías quienes, traicionando su rol, cometieron abominables abusos que por un hipócrita espíritu de cuerpo se buscan mantener en la impunidad.

Sin embargo, Cossio también critíca duramente a Sendero Luminoso y su ideología totalitarista, fanática y mesiánica. Y como haciendo una autocrítica, reconoce que el conflicto fue demasiado complejo como para limitarlo a una lucha de dos bandos. Quizá el papel de comunidades, rondas y otros actores de la sociedad en la barbarie de los años ocheta y noventa sean motivo de otro libro más.