La movilización política que se ha despertado en las redes sociales y el rol que éstos han tenido dentro de levantamientos contra gobernantes en todo el mundo han provocado la suspicacia del poder político, y el deseo de controlar el Internet. En el artículo de Peter Apps de Reuters, las herramientas virtuales están cuestionando las estructuras políticas y obligan a gobiernos, partidos y demás grupos políticos deben aprender a manejarlas lo más rápido posible.

Según Apps, el monitoreo restrictivo de la actividad en Internet no es la solución:

"Lo que la gente está mirando cada vez más es el análisis predecible", dijo Rohini Srihari, un científico informático de la Universidad de Buffalo. "El Santo Grial es derrocar a las noticias. Están buscando predecir un motín específico o una protesta en un lugar y momento específico."

"Las redes sociales son mejores para lo estratégico que para el análisis táctico", Fadl Al Tarzi, director de operaciones de la firma basada en los Emirato Árabes Unidos News Group International, dijo en una conferencia sobre redes sociales y política en el Instituto de los Estados Unidos por la Paz en Washington. "Es díficl predecir exactamente cuando algo pasará pero te puede mostrar tendencias. Sí, si tú tienes suficientes conversaciones con la gente indicada tendrás el mismo nivel de información pero eso no es siempre económico o posible de hacer a la misma velocidad"

La cuestión para los gobiernos es qué respuestas pueden probar ser efectivas y aceptables. Tan complejos y rápidos son los sistemas modernos, algunos expertos dicen, que cualquier intento de censura o de cierre simplemente será eludido o aplastado.