#ElPerúQueQueremos

Adiós al maestro Carlos Iván Degregori

Publicado: 2011-05-18

Hoy partió Carlos Iván Degregori. Desde hacía dos semanas varios amigos y colegas habían publicado notas en los medios sobre su delicado estado de salud. Después de algunos años de lucha contra la enfermedad, todo parecía ahora consumado. Pero no había perdido el espíritu ni el buen humor. Hace menos de un mes, por ejemplo, llegó a La mula para volver a retomar las publicaciones de su blog. Había decidido rebautizar su espacio virtual con el título “Se sienten pasos”. Eran los pasos de la muerte que Carlos Iván Degregori oía cada vez más cerca pero que no le medraban su ánimo. Por el contrario, parecía tomarlo con un espíritu juguetón y risueño, aún consciente de la magnitud de su enfermedad. Si bien hoy partió Carlos Iván Degregori, los testimonios de sus amigos y las personas que lo conocieron y sobre todo la relectura de sus libros volverán a mantenerlo cerca; esa obra que nos ha ayudado a entendernos como nación y que muestran esa verdad alcanzada por Degregori: que no bastaba con analizar la realidad sino con tratar transformarla.

Empezando por allí, por la vocación de transformación, Carlos Iván entra a la escena política como militante de Izquierda Unida. Licenciado por la Universidad de Huamanga, comenzó llevando a la práctica las teorías sociales aprendidas desde la antropología. “Llegué a conocerlo hace 41 años, durante los azarosos años de los 70. Militábamos en un sector de la izquierda fraccionada en mil pedazos y atacándonos entre sí a nombre de la misma revolución, Pero él nunca tuvo ni consideró como enemigo a nadie que luchaba por un verdadero cambio de nuestra patria”, recuerda Carlos Tapia, ex militante también de Izquierda Unida y hoy aliado del partido Gana Perú.

Carlos Iván se abocó a la tarea política a través del trabajo de base, recorriendo el Perú: “Aún hoy los sitios del Perú que no conozco tienden a coincidir con aquellos donde no viajé en esos años porque no había militantes que me recibieran, o no tuve la oportunidad de encontrarme con ello”, mencionaría años después.

Desde el lado intelectual la senda empezaba a definirse. En esa misma década, tras licenciarse, aceptó ser catedrático de la convulsa universidad de Huamanga viendo desde una perspectiva privilegiada la génesis del Senderismo. El vacío, la incertidumbre y las sospechas que existían sobre este movimiento subversivo le alentaron a mostrar a la academia la naturaleza que los constituía. “De repente, en los años ochenta, se dan cuenta otros colegas y yo también de que no muchos tenían ese conocimiento sobre un grupo muy pequeño y secretista, localizado hasta fines de los años setenta principalmente en Ayacucho. Me pidieron que escriba una ponencia y, otra vez, no paré. Me convertí en uno de los pocos “senderólogos”, término descriptivo pero que podía ser utilizado despectivamente tanto por el Estado como por los propios senderistas”. Sin lugar a dudas, el legado intelectual de Carlos Iván remite inevitablemente al estudio del partido de “Los mil ojos y mil oídos”. Obras como “El surgimiento de Sendero Luminoso”, “Qué difícil es ser Dios”, “Jamás tan cerca arremetió lo lejos. Memoria y violencia política”, entre otros, son textos de referencia obligada para poder comprender el fenómeno que tanto dolor y sufrimiento significó para los peruanos.

Pero fue en los la década de los 80’s cuando el trabajo intelectual y la militancia se juntaron, en aquella época el la cual el desborde popular y la crisis política del país reclamaban un cambio. En esos años Degregori se lució colaborando para el diario Marka y como miembro fundador de la revista “Zorro de Arriba y el Zorro de Abajo”; la última una publicación emblemática del pensamiento de izquierda en la que confluirían Nicolás Lynch, Sinesio López, Rolando Ames, entre otros intelectuales.

Por esta razón la desaparición de la Izquierda Unida en los 90’s, entrampada en sus propias contradicciones, sería un duro golpe para él. Sobre ese episodio Carlos Iván recordaría: “Personalmente, lo he dicho alguna vez, me sentí como un ciudadano de la Atlántida después del hundimiento de su continente”. Los años que siguieron fueron dedicados a la actividad intelectual, refugiándose en los claustros universitarios de San Marcos y como investigador en el Instituto de Estudios Peruanos (IEP).

Sin embargo, su última gran empresa estaría aún por llegar. Al aceptar el cargo de comisionado de la “Comisión de la Verdad y Reconciliación”, Degregori se abocó a la tarea de reconstruir el conflicto armado interno en su toda su cruda extensión. Junto con los comisionados, escucharon de la boca de las víctimas los terrores a los que fueron sometidos bajo el fuego cruzado sostenido entre Sendero Luminoso y las Fuerzas Armadas. Los nueve tomos que resultaron de la recolección de casi 17 mil testimonios son el esfuerzo más grande realizado hasta el momento por tratar de desentrañar la verdad de las décadas de violencia que vivimos como país.

Lamentablemente, en los últimos tres años Carlos Ivan fue diagnosticado con un mortal cáncer al páncreas que lo fue debilitando poco a poco. A pesar de la encarnizada lucha que protagonizó, y con la enfermedad a cuestas consumiendo su físico pero jamás su espítiru, el antropólogo le confesaría al periodista Gustavo Gorriti hace unas semanas: “Me quedo sin lograr mucho que hubiera querido hacer, pero necesitaría otra vida… no la tengo, con la que he tenido estoy en paz”. Carlos Iván decidió pasar sus últimos días en su hogar, aguardando sin perder ni un segundo la lucidez. Sobre el inevitable momento que se avecinaba, Carlos Iván mencionó en aquella entrevista: “No sé cómo será en el momento final, pero ahora estoy sereno, en paz”.

Esta noche Carlos Iván Degregori estrechará la mano de Mariátegui, conversará con Arguedas, discutirá con Valcárcel, se reencontrará con Alberto Flores Galindo. Tomará asiento en la distinguida mesa de los grandes intelectuales del país que ya no están más entre nosotros, aquellos que con sus obras nos ayudaron a entendernos como nación.


Escrito por

Esteban Valle-Riestra

\"Nothing great was ever achieved without enthusiasm\" RWE


Publicado en

Redacción mulera

Aquí se publican las noticias del equipo de redacción de @lamula, que también se encarga de difundir las mejores notas de la comunidad.