#ElPerúQueQueremos

La leyenda Kurt Cobain

Publicado: 2011-04-05

Kurt Cobain falleció el 5 de abril de 1994. Días antes de que encontraran su cuerpo, y luego de la visita de su hija Frances, Cobain escapó de un centro de rehabilitación en Los Ángeles. Salió a la terraza con un cigarillo, escaló una reja de 1.80 metros y tomó un vuelo de vuelta a Seattle. Según las investigaciones, Cobain deambularía durante algunos días por las calles de la ciudad antes de dispararse la cabeza en el garaje de su casa. Junto a su cuerpo hallaron también una carta en un pequeño jarrón de flores. Allí Kobain confesaba su cansancio musical y todo lo que lo rodeaba. "Ya hace demasiado tiempo que no me emociono ni escuchando ni creando música, ni tampoco escribiéndola", señaló, "ni siquiera haciendo Rock'n'Roll".

Cobain había perdido la pasión. En esa última carta se preguntaba por qué no podía disfrutar pese a tenerlo todo: una gran banda, "una mujer divina, llena de ambición y comprensión", y una hija que le recordaba mucho a como había sido él. Las drogas, confiesa, eran la única vía que le permitía recuperar ese entusiasmo perdido. Pero eso no remediaba el sentimiento de culpa que percibía cuando se apagaban las luces de los conciertos y oía el furor de la gente. "Simular que me lo estoy pasando el 100% bien sería el peor crimen que me pudiese imaginar", escribió. En las últimos tres giras había reconocido ya esa hipersensibilidad, frustración y culpa que le generaba estar frente a los miles de fanáticos que se aglomeraban para escucharlo. Él no era Freddy Mercury, que amaba que el público lo amase y adorase. Pese a la imagen que proyectaba tras sus conciertos, esa figura de rockero rebelde y siniestro, Cobain se consideraba un tipo demasiado sencillo, un "piscis triste, sensible, insatisfecho".

Según la autopsia, Cobain murió el 5 de abril a las 11 de la mañana. Tenía en el cuerpo tres veces la cantidad normal de heroína por el que, según algunas versiones, le habría sido imposible levantar la escopeta con la que se quitó la vida. Murió a los 27 años como Jimi Hendrix, Jim Morrison y Janis Joplin. Y sus cenizas fueron esparcidas en un templo budista de Ithaca y en el río Wishkah. En las últimas líneas de su carta, Cobain justifica su muerte. "Se me ha acabado la pasión", finalizaba, "y recuerden que es mejor quemarse que apagarse lentamente". Su música, sin embargo, permanece aún con nosotros, encendida todavía, el mismo fuego que ilumina el pasado de una generación.

Última carta de Kurt Cobain


Escrito por

Edwin Chávez

(Post)estructuralista, narrador sci-fi, cuentista metaliterario, pixel-prototipeador, {css: lover}, poeta [01]nario.


Publicado en

Redacción mulera

Aquí se publican las noticias del equipo de redacción de @lamula, que también se encarga de difundir las mejores notas de la comunidad.