En un contexto en el que la justicia investiga casos de corrupción como Lava Jato y Los Cuellos Blancos del Puerto, se siguen viendo prácticas montesinistas que recuerdan a lo que ocurrió en la década de los noventa, señaló el fiscal José Domingo Pérez Gómez.
En una entrevista brindada a Canal N, el fiscal defendió su decisión de interrogar a Vladimiro Montesinos como parte de las investigaciones contra Keiko Fujimori. Pérez Gómez argumentó que hay una disposición que establece aspectos previos a la presunta actividad criminal del lavado de activos y que el nexo entre la lideresa de Fuerza Popular y el exasesor de su padre, Vladimiro Montesinos, sería Vicente Silva Checa. El fiscal se basó en que Silva Checa fue señalado por testigos como una persona con poder de decisión, debajo de Keiko, dentro del partido fujimorista. Además, señaló que en una computadora de Silva Checa se encontró información que estaría relacionada a Fuerza Popular.
Citando al historiador Alfonso W. Quiroz, el fiscal señaló que en la década de los noventa, donde había megacorrupción, existía una relación funcional entre el poder político y la organización criminal para controlar los poderes del Estado. "Prácticas montesinistas que es lo que estamos viendo actualmente", dijo.
"También di cuenta que uno de los testigos afirmó que Yoshiyama dijo que tenían control de la investigación hasta que se descubrió el caso Los Cuellos Blancos".
"Lo que se busca es intimidación y esta puede ser no violenta, a través de amenazas, para que los fiscales no cumplamos con la labor y también para que los testigos se retraigan del caso, para que no declaren".
El fiscal José Domingo Pérez dijo estar preocupado porque algunas personas defensoras del fujimorismo, del grupo llamado "La Pestilencia", que participan en protestas en su contra tienen denuncias por homicidio calificado. El interrogatorio entre el fiscal del caso Lava Jato y Vladimiro Montesinos será el 7 de octubre.
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[Foto de portada: EFE]
