Estaba cantado. Uno de los primeros efectos —negativos, claro— de la reciente compra del grupo Intercorp del 100% de las acciones de Quicorp SA (Química Suiza), que incluye las cadenas de farmacias Mifarma, BTL y Fasa, sería el alza de precios de las medicinas, advirtió el Colegio Químico Farmacéutico de Lima, debido a la posición de dominio que se producirá en el mercado local, en el que no existe una ley de control de concentraciones o fusiones, como en la mayoría de países.

Esta especie de monopolio farmacéutico afecta la oferta en la producción y distribución de medicamentos, así como las condiciones laborales de los profesionales responsables y finalmente, el precio al consumidor, indicó el nuevo Decano Departamental de Lima del referido gremio, Javier Llamoza.

"Cuando se concentra el mercado, el abuso de su posición de dominio es mayor. Esperamos que el Ministerio de Salud pueda regular en favor de los ciudadanos y recoja los aportes que desde el gremio farmacéutico venimos exigiendo, que es el reconocimiento de un nuevo modelo de farmacias en el primer nivel de atención".

Además, subrayó el representante gremial, la demanda se reduciría, lo que no solo impactaría en los precios,  sino en el crecimiento de la industria, ya que muchos laboratorios fabrican marcas exclusivas solo para cadenas de farmacias como MiFarma, BTL y Fasa.

Por ello, Llamoza cuestionó la falta de una ley que regule las adquisiciones y fusiones de este tipo en el Perú para proteger a los consumidores finales, en un contexto en el que la salud tiene un problema de desabastecimiento crónico, lo que obliga a los ciudadanos a recurrir a boticas privadas, donde la oferta principalmente es de medicamentos de marca. 

"Los medicamentos genéricos solo están disponibles en un 49% de farmacias de Lima Metropolitana, por ser de bajo costo y poco rentables para un comercio que ahora está en manos de un grupo que sabe hacer negocios".

Intercorp responde

Jorge Lazarte, vicepresidente de InRetail, del grupo Intercorp y dueña de Inkafarma, descartó que vaya a subir precios de las medicinas en las cadenas que ahora manejan, en un intento por transmitir un mensaje de tranquilidad a los usuarios. 

"Lo primero que queremos dejar claro y que no quede ninguna duda, es que ni Inkafarma ni Mifarma van a subir precios como consecuencia de esta transacción". 

En RPP, Lazarte explicó que hay varios motivos que impiden subir los precios de los medicamentos.

"El primer motivo es que el mercado no va a permitir un alza de precios, se ha hablado de monopolios, de concentración de mercado, de posiciones dominantes, y la verdad es que creemos que esto es desconocimiento de cómo está compuesto el sector de medicamentos en el Perú".

Uno de esos motivos, según el ejecutivo de InRetail, es que en el Perú existen 12,000 boticas, entre independientes y cadenas, de las cuales 10,000 corresponden a empresas independientes.

"Las boticas de Inkafarma y Mifarma son solamente 2,000, que representan menos del 20% del sector. De manera que, si Inkafarma o Mifarma pretendieran hacer una subida de precios, no tengan duda de que lo primero que hará el consumidor es migrar a la botica independiente del costado".

¿Y el Congreso?

Si bien existen iniciativas legislativas o proyectos de ley en el Congreso controlado por el fujimorismo para regular las concentraciones o fusiones, lo cierto es que a la fecha, el tema, pese a su trascendencia, sigue relegado, señaló el Indecopi en un comunicado.

"A diferencia de otros países, en el Perú no existe una ley de control de concentraciones o fusiones que permita revisar la compra de empresas competidoras, por lo que el Indecopi no puede prohibirla ni condicionarla".

Sin embargo, el organismo de defensa del consumidor anunció que vigilará que no se incurra en actos de abuso de posición de dominio o que impidan a las farmacias independientes competir activamente en el mercado.

"La supervisión de este mercado se realiza continuamente, de ahí que en el 2016 se haya sancionado a cinco cadenas de farmacias por un acuerdo secreto de precios, para elevar el precio de 36 productos farmacéuticos y afines, y se les ordenó un programa de prevención de incumplimiento de las normas de libre competencia, que se encuentra actualmente en ejecución".

De hecho, en el 2016, tras una investigación, Indecopi destapó un cartel de precios conformado por las boticas Felicidad, Arcángel, Fasa, Mifarma e Inkafarma. Estas tres últimas ahora pertenecen a un mismo grupo empresarial, con lo que tendrá una participación de más del 80% del mercado farmacéutico local.

"Es una lección patética la que nos está dejando este caso de la fusión en el mercado farmacéutico: 'Indecopi te va a sancionar si sigues concertando precios. Para evitar eso, mejor cómprate a tu competencia y fusiónate'", dijo el excongresista Jaime Delgado, citado por La República, quien planteó en el 2012 un primer proyecto de ley  que regule las fusiones y adquisiciones.

"Es Indecopi quien tendría que haber reclamado desde hace muchos años por este sistema de competencia imperfecto. Incluso tuvo la oportunidad, mediante el Ejecutivo, de pedir facultades para reformar el sistema de competencia, pero nunca lo hizo".

Delgado recordó además por qué no prosperó su iniciativa legislativa en un país en el que —subrayó— no hay liberales sino lobbistas.

"Fue por la oposición de la Confiep y el Ministerio de Economía y Finanzas. La Confiep hace cuestión de Estado y no porque sean liberales, sino porque buscan proteger a grupos de interés. En países como EEUU, Francia, Inglaterra, Alemania... todos liberales, cuentan con legislaciones de evaluación de concentraciones y fusiones económicas. Aquí no tenemos liberales, tenemos lobbistas que defienden intereses".

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