Cumplieron con su anuncio. Vecinos de Ancón, Puente Piedra, Ventanilla, Pachacútec, Villa de los Reyes y Zapallal, junto a representantes de empresas de transportes y asociaciones civiles iniciaron hoy, desde el kilómetro 27.5 de la Panamericana Norte (óvalo de Puente Piedra), una marcha hasta el kilómetro 25 donde se ha instalado una nueva garita de peaje.
Precisamente, la medida de fuerza se debe a la instalación del dispositivo vial y al aumento de las tarifas decretadas por la concesionaria Rutas de Lima. Desafortunadamente, la protesta se salió de control y se reportó quemas de llantas, arrojo de basura y bloqueo de pistas. Debido a ello, la Policía Nacional tuvo que emplear gas pimienta y bombas lacrimógenas para contener el desorden.
La reacción no tardó en llegar y los protestantes lanzaron piedras a los agentes policiales que incluso afectaron a una reportera de Canal N. Hasta el cierre de esta nota, la Policía intenta dispersar a los manifestantes.
Pagos excesivos
"Los vecinos que viven en el sur del distrito [Puente Piedra] son los más perjudicados, pues para venir a atenderse al hospital tienen que pagar más por el taxi, y peor si quieren sus trámites en la municipalidad. No existen vías alternas y hay que pagar sí o sí el peaje, no tenemos derecho al libre tránsito", dijo a Exitosa Noticias Raúl Vásquez, integrante del colectivo Puente Piedra Viable.
Los vecinos también se han quejado del aumento de las tarifas del transporte público debido a la instalación de la nueva garita. Sobre este tema, la Defensoría del Pueblo expresó su solidaridad con los vecinos afectados y calificó de abuso el cobro del peaje.
En tanto, Luis Quispe Candia, director de la ONG Luz Ámbar, si bien mostró empatía con el reclamo de los vecinos recordó que la concesionaria está cumpliendo un acuerdo pactado con la gestión de Susana Villarán. "Anular un contrato de esta naturaleza, como se está proponiendo es prácticamente imposible", dijo a Exitosa Noticias.
¿Y qué ha dicho Rutas de Lima al respecto? Esta fue la respuesta de Gisella Benavente, representante de la concesionaria, a El Comercio: "La garita responde a las obras que ya benefician a los usuarios y al mantenimiento de las vías".
[Foto de Andina]
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