Tras las históricas elecciones legislativas del domingo, la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), la coalición que aglutina a los partidos opositores en Venezuela, ganó en los principales bastiones chavistas, lo que confirma la contundente derrota del oficialismo, para lo cual fue clave -según diversos analistas- la crisis económica sin precedentes que vive el país: la inflación ya supera el 200%, la escasez se agrava y el bolívar se devalúa cada vez más.

Según el Consejo Nacional Electoral (CNE), la MUD hasta el momento obtiene 107 escaños en la Asamblea Nacional —de un total de 167—, frente a los 55 que tiene el partido del presidente Nicolás Maduro, pero el grupo opositor asegura que logró 112 curules, suficientes para impulsar una gran reforma que marque el fin del chavismo en Venezuela.

Pero lo cierto es que aún hay cinco escaños por adjudicar oficialmente.  De ellos, tres son de las circunscripciones de las minorías indígenas, que por el momento no han sido atribuidos a ninguna fuerza política. Otros dos no han sido asignados.

Oficialismo perdió sus bastiones

El chavismo perdió en todas las circunscripciones en las que siempre tuvo una superioridad que parecía imbatible. Así, para lograr esta victoria histórica, la oposición revertió el escenario que dispuso el régimen de Nicolás Maduro a través del sistema electoral y del gerrymandering, es decir, la manipulación de las circunscripciones para reducir las opciones de sus rivales.

Pero el sistema electoral, diseñado para perjudicar a la oposición, la terminó beneficiando. ¿La razón? Sobrerrepresentándola en la Asamblea Nacional, y terminó perjudicando el chavismo, que acaba subrepresentado: logró el 33% de los escaños pese a haber cosechado el 41% de las voluntades.

La oposición logró ganar en 20 jurisdicciones históricamente chavistas. Los más destacables son el N°1 de Barinas, el estado donde nació Hugo Chávez, en el que el oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) tendía a ganar por casi 15 puntos. En las elecciones del domingo, sin embargo, perdió por 4%.

Así, con cerca del 57% de los votos escrutados, la MUD obtuvo el 67% de las bancas de la Asamblea Nacional.

¿Por qué son importantes los escaños que faltan asignar?

En casi todos las jurisdicciones sobre los cuales el CNE no entregó resultados finales el domingo son aquellos en los que el chavismo solía ganar por entre 20 y 30 puntos porcentuales. 

Hay una diferencia crucial entre los 107 diputados asignados por ahora de forma oficial a la MUD y los 112 con los que la coalición de opositores dice contar: la que hay entre una mayoría de tres quintos en la Asamblea Nacional (a partir de los 101 escaños) y una mayoría de dos tercios (a partir de los 112). 

La MUD ya tiene asegurada la primera de estas mayorías, la de los tres quintos de los escaños, la misma de la que dispone actualmente Maduro. Con ello, la oposición puede aprobar leyes habilitantes para el Ejecutivo, por ejemplo, en materias de economía y seguridad nacional. También podrá censurar ministros.

Pero con una mayoría de dos tercios, que la MUD asegura tener, son muchas más sus posibilidades, como designar o destituir a las autoridades de otros poderes: magistrados del Tribunal Supremo de Justicia o rectores del Consejo Nacional Electoral, según la Constitución vigente de 1999.

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Foto cabecera: EFE