El Ejecutivo oficializó este sábado el estado de emergencia por 45 días en el Callao, ante la ola de violencia e inseguridad en el primer puerto, debido al enfrentamiento entre mafias y bandas vinculadas al tráfico de drogas. 

Pero, ¿qué implica la medida y cuáles son sus alcances? 

Control interno

La Policía mantendrá el control interno en la provincia chalaca. Es decir, las Fuerzas Armadas no tendrán participación en los operativos, al menos en esta primera etapa. 

El estado de excepción tendrá una vigencia de 45 días en principio, que podrían prorrogarse. Esto implica dos aspectos: da el marco legal para mayor eficacia policial y se incrementa el número de efectivos policiales en el Callao.

Además, en ese lapso de tiempo quedan suspendidos los derechos constitucionales relativos a la libertad y seguridad personal y a la inviolabilidad de domicilio en todo la provincia constitucional.

Es decir, la Policía podrá ingresar sin orden judicial a domicilios que son usados como escondite de delincuentes o depósitos de armas, así como detenciones sin permiso de un juez. 

La medida de excepción no implica el impedimento de reuniones ni toque de queda en el Callao. 

Lucha contra el crimen organizado

El Callao tendrá mayor presencia policial. El Ministerio del Interior anunció que se enviarán 1,500 policías para megaoperativos y 160 agentes de la Dinoes para patrullaje a pie. Se reforzará también el número de efectivos de la Dirincri y de la Dirandro. 

La norma refiere que en la provincia chalaca operan organizaciones delictivas dedicadas al tráfico ilícito de drogas, que conllevan a la comisión de otros delitos: sicariato y homicidio,  entre otros, incluyendo otras organizaciones delincuenciales dedicadas a la extorsión.

¿Es suficiente?

La medida del Ejecutivo no ataca un problema clave en el Callao que provocó que la situación llegue a límites insostenibles: la corrupción de las autoridades e instituciones chalacas.

De hecho, el gobernador chalaco, Félix Moreno, tiene serias denuncias en su contra y  acaba de admitir que la situación se le fue de las manos, al señalar que "todos saben dónde están las bandas delincuenciales en el Callao", aunque debería aclararse si esto es por incapacidad, negligencia o complicidad.

Moreno pertenece a Chim Pum Callao, el movimiento político de Álex kouri, que está enquistado en el poder desde 1996, tiempo en el que la violencia y la inseguridad se disparó en el primer puerto.


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