En tiempos en los que bandas, productores, público y Estado suman para que nuestra música contemporánea pueda desarrollarse como industria, persisten problemas que desaceleran esa evolución. 

Esta vez, se trata de un lío generado en Aduanas (dependencia de la Superintendencia Nacional de Administración Tributaria, alias Sunat) y que impide que el último disco del músico nacional Pipe Villarán (x G-3 y Fuckin Sombreros) esté dando vueltas en tu tornamesa.

Lo explicamos paso a paso siguiendo la detallada cronología que expone el comunicado que ha lanzado su sello, A TUTIPLEN RECORDS. Veamos.

Pipe Villarán editó su primer álbum, “Cosmos”, en setiembre del 2014. Varios medios lo consideraron entre los mejores discos peruanos ese año. Sali´ó primero como disco compacto y se tenía previsto que en noviembre saliera la edición en long-play (vinilo).

Los vinilos se fabricaron en los EEUU y llegaron al Perú vía Fedex el 09 de octubre de 2014. Luego de entregar la documentación correspondiente, el día 28 de ese mes se pagaron los derechos de aduana para la entrega final de los vinilos.

Ahí empiezan los problemas. El día 30 Sunat-Aduanas solicitó que se presente una carta aclaratoria por los valores declarados en la factura. La gente de Villarán presentó la carta. El 12 de noviembre Sunat-Aduanas solicitó una nueva carta aclaratoria en la que se corrobore la información de la mercancía. También se cumplió con este pedido.

El 21 de noviembre Aduanas impuso a Pipe una multa por mala declaración. Según explica A tutiplén en su comunicado:

Ante esta situación se contaba con dos opciones: (i) presentar una carta a Aduanas indicando que no existía un error en la declaración, lo cual dilataría el retiro de los vinilos; o, (ii) pagar la multa para que en 48 horas Aduanas entregue los vinilos. A pesar que se trataba de un error de Aduanas y no de Pipe, se pagó la multa para agilizar la entrega de los vinilos ya que habían transcurrido dos meses desde su arribo al país.

A partir de ahí, entramos a un mareo de trámites y deficiencias del sistema de aduanas, que explica detenidamente el comunicado de A tutiplén:

"El 18.12.14 se hizo el reaforo de la carga y la solicitud electrónica a Aduanas. Las rectificaciones fueron rechazadas dos veces, ya que el sistema de Aduanas aparecía por error 7 ítems a importar, cuando solo son 2 ítems. Aduanas dijo que la única vía para solucionar el inconveniente y corregir su falla en el sistema, era generar una nueva solicitud que se presentó la primera semana de enero. Pero el 12.01.15, Aduanas, en su inoperante accionar, pide que se le envíe (¡nuevamente!) toda la información a fin de que corrijan el error en su sistema y se genere una nueva solicitud de atención de usuarios. Es decir, piden que empecemos de nuevo todo el procedimiento"

Para A tutiplén, "es irracional que vinilos cuyo valor total no superan los $ 1,500 presenten tantos problemas para ser retirados". El 9 de febrero del 2015 se cumplirán 4 meses desde que el paquete está en el país y sus dueños aún no pueden desempacarlo. Ellos consideran que los "peros" que Aduanas pone para entregarlos son "excusas delirantes".

"Pipe Villarán quiere hacer las cosas correctamente, pero la ineficiente burocracia de Sunat-Aduanas le dice que no tras varias excusas sucesivas, cada una más inverosímil que la otra. ¿Así el Estado Peruano quiere fomentar las importaciones legales y la música peruana de calidad? Todo esto explica la gran informalidad y contrabando en el país, donde los actos del estado solo generan incentivos para que a las personas no les quede otra que actuar al margen de la ley", dicen en la disquera, una de las más activas e importantes del medio.

LAS PALABRAS DE PIPE

Enterados de este laberinto burocrático, quisimos saber cómo se sentía el músico Pipe Villarán. Hablamos de "sentir" porque en este caso, no se trata sólo de las pérdidas y retrasos que se generan para el emprendimiento... sino de el maltrato que está sufriendo un creador. 

“Todo este vía crucis me suscita inmensa rabia, frustración e impotencia- nos dice Pipe al teléfono- Si a eso le sumas que el Estado peruano ha arruinado la culminación de un proceso creativo que arrancó en el 2011 y que se hizo con muchísimo cariño y cuidado... composición, producción, viajes a EEUU para grabar y mezclar, formar una banda, y calcular hasta el más mínimo detalle para que el lanzamiento de "Cosmos" fuera un éxito... el daño es incalculable"

¿Cuánto valen 3 años de intenso trabajo?, se pregunta, con justicia, Villarán. "Lo que ha hecho SUNAT-ADUANAS conmigo no tiene nombre. Han recibido puntualmente mi pago por derechos de desaduanaje en octubre de 2014 y hasta ahora se rehúsan a entregarme mi mercadería, inventando pretextos y trabas una tras de otra. ¡Hasta me han multado por "declarar mal"!, cuando lo que en realidad ocurrió fue que interpretaron mal la factura del proveedor (escrita en inglés)"

Y así, el daño está hecho, y lo más triste es que no se avizora una solución:

“No hay ninguna novedad en esta pesadilla. Espero tener pronto mis vinilos y que no estén dañados tras tantos meses de almacenaje… Quiero agradecer todas las muestras de solidaridad que he recibido, y aconsejarle a mis amigos músicos que quieran sacar vinilos (que no son pocos) que eviten cualquier acercamiento con SUNAT-ADUANAS”, nos dice.

Consideramos lamentable que en lo que debiera ser ya una nueva etapa para la industria de la música en el país, ocurran casos que sigan acrecentando la desconfianza hacia nuestras autoridades e instituciones, cuando necesitamos su concurso y acciones para que nuestro sector musical se siga consolidando. La suma de todos da el mejor total. Pero en esta historia, es evidente, la autoridad resta.

“Hasta quizás me salga una canción de toda esta odisea...” concluye Pipe, y nosotros creemos que sería lo mejor, sería darle la vuelta, que algo que nos afecta nos haga ir un poco más adelante, es casi una ley de la vida, ¿no?