Yo no había escuchado Corazón serrano hasta el primer viaje que hice a Piura a fines de 2010. En años anteriores lo mío había sido un desfile por toda variante de música gótica y metal, así que en principio aquel estilo musical no encajaba con mi gustos. Sin embargo debo a las sugerencias y paciencia de Octavio el haberme vuelto, poco a poco, un seguidor de este grupo peruano. 

Claro que el asunto fue a trancas y barrancas (por esto lo de "paciencia"), sobre todo considerando que, para variar, el bueno de Octavio me recordaba las canciones de Corazón Serrano en plena bajada de un "ya fue" amoroso. 

Como siempre he creído en las casualidades resulta que al poco tiempo, en uno de los colegios donde me toco caer, la profesora de canto (y danza) durante las horas libres se las daba por interpretar alguna de sus canciones, y así la voz de Rosalba me hacía toparme con "Ausencia" o "Vete". 

El sonido de Corazón Serrano no es tan sencillo, además de las melodías o tonos vocales, uno debiera prestar atención a los arreglos (pienso en especial en el caso de los teclados). Al respecto, un ejemplo podría ser la versión que hacen de la salsa de David Pavon, "Si me ves llorar por ti", donde se aprecia claramente la originalidad técnica del grupo, como se dice, su sello personal. 

Ahora, las letras ameritan un comentario aparte. Si uno escucha de tirón las canciones de Corazón Serrano la primera impresión que tendremos será la del desamor en su escala suprema. De hecho, sin exagerar, estamos ante un hondo "vivir la ausencia". Uno bien puede identificarse con esas canciones y no solo corearlas por  moda si no porque bien retratan esas tragedias cotidianas del amor, sin florilegios, ni florituras, directo a las evocaciones que atormentan o las huellas del sinsabor. 

Para finalizar, la reciente muerte de la vocalista del grupo, Edita Guerrero, me ha hecho recordar a diversos cantantes que representaron en el imaginario una querencia local, una identificación de heterogeneidad peruana a través de sus voces o acordes. Evoco así las canciones de Chacalón, Johnny Orosco y Makuko Gallardo. 

No vale el rótulo (por demás inexacto) de "música popular" o cuán o menos peruano puedes ser si escuchas (o no) Corazón Serrano, se trata más bien de hacer un balance de estos puntos: 1) su valor musical (para lo cual en principio habría que deshacerse de esquemas y prejuicios y 2) su valor simbólico de una identidad nacional (que se ha acentuado a raíz de los repudiables comentarios racistas que ulularon en la web). Dígame usted, amigo ¿por qué escucha Corazón Serrano? 

1. Si me ves llorar por ti

2. Mi corazón está llorándote 

3. Cuatro mentiras

4. Decidí vivir sin ti 

5. Vete 

6. Ya te olvide

7. Díganle 

8. Tu ausencia

9. Te voy a extrañar 

10. Por amor

Enlaces relacionados:

¿Es posible triunfar sin alienarse?

Murió Edita Guerrero, vocalista de "Corazón Serrano"