“Ya no me gustan los cielos azules, prefiero cuando están plomizos porque no vuelan los drones”
Por primera vez, una familia paquistaní relata la muerte de su matriarca y pide el fin de este tipo de ataques ante el Congreso de EEUU.
“Ya no me gustan los cielos azules, prefiero cuando están plomizos porque entonces no vuelan los drones”, sentencia Zubair ur Rehman, de 13 años.
La familia de Rafiq ur Rehman, un profesor de enseñanza primaria en la región de Waziristán del Norte de Pakistan y sus dos hijos, Zubair, de 13 años, y la pequeña Nabila, de 9, quedó rota. El 24 de octubre de 2012, fue víctima de la guerra de EEUU contra militantes islamistas radicales en Pakistán tras un ataque con drones, aviones no tripulados, que acabó con la vida de su matriarca y madre, Momina Bibi, de 68 años.
Según Amnistía Internacional la lucha estadounidense ha causado unas 2,200 muertes en el país durante la pasada década. Al menos 400 muertos eran civiles y posiblemente otros 200 no eran combatientes.
Ahora, Rafiq, junto con su familia, ha relatado por primera vez ante congresistas y senadores de EEUU lo que le sucedió a su familia y cómo ha cambiado la vida de su comunidad en región fronteriza con Afganistán, desde que Washington adoptó esta nueva estrategia de lucha antiterrorista.
“Docenas de miembros de mi propia tribu, que juro que eran ciudadanos normales y corrientes, han fallecido. Y mientras a sus familias se les niegue la voz para hablar, yo hablaré por ellos. Los drones no son la solución”, ha señalado Rafiq.
“Yo soy profesor y mi trabajo es explicar, pero ¿cómo explico algo así? ¿Cómo puedo explicar algo que ni yo mismo entiendo? ¿Cómo puedo asegurar a los niños que no va a aparecer otro drone que los mate?”, ha preguntado Rafiq a los cinco legisladores presentes en la sala.
Las declaraciones son desgarradoras. Con un velo azul con flores amarillas y voz tímida, Nabeela ur Rehman relata el fatídico día: “Escuché un grito. Todo se volvió negro. Empecé a correr pero vi que tenía sangre en la mano. Traté de vendármela, pero no paraba de sangrar”.
Según fuentes del Gobierno Paquistaní consultadas por organizaciones de derechos humanos como Amnistía Internacional, EEUU ha lanzado entre 330 y 374 ataques con drones entre 2004 y septiembre de 2013. Además, habrían muerto entre 400 y 900 civiles. El total de muertos en ataques perpetrados por drones estaría entre los 2,200 y los 3,600.
Además, un informe de la ONU señala que ya en el 2012 se había doblado el número de bombas lanzadas desde este tipo de aparatos en Afganistán respecto del 2011. Es más, el gobierno paquistaní afirma que, por cada "terrorista" eliminado por drones, pierden la vida 140 civiles, informa Efe.
“Escuché un grito. Todo se volvió negro. Empecé a correr pero vi que tenía sangre en la mano. Traté de vendármela, pero no paraba de sangrar”.
"El secreto en torno al programa de aviones no tripulados da al gobierno estadounidense licencia para matar fuera del alcance de los gobiernos o de las normas fundamentales del derecho internacional. Ya es hora de que Estados Unidos diga la verdad sobre el programa de drones y haga rendir cuentas a los responsables de estas violaciones", manifestaba la semana pasada Mustafa Qadri, investigador de Amnistía Internacional sobre Pakistán.
"¿Qué esperanza de reparación pueden tener las víctimas de los ataques de drones y sus familias cuando Estados Unidos ni siquiera reconoce su responsabilidad en ataques concretos?", se pregunta Quadri.
A pesar de las aterradoras cifras, la Administración Obama se niega a confirmar cualquier dato sobre víctimas inocentes de este tipo de bombardeos por "razones de seguridad, aunque son menores que las que aparecen en la prensa".
Por el momento, el congresista Rush Holt pide una “investigación en profundidad sobre las consecuencias y los efectos de estos ataques y un debate nacional sobre cómo EEUU puede sustentarse en el futuro con sus actuales políticas de seguridad", señala El País.
Las críticas no son nuevas, la NBC ponía en duda en febrero la legitimidad, moral y constitucional, de los argumentos legales en los que se sostiene el uso de drones para ejecutar a sospechosos, en caso de pertenecer a una organización terrorista. El diario afirma que Obama debería de someter las decisiones sobre las ejecuciones selectivas al juicio de los tribunales y del Congreso.
Esta opinión la comparte el congresista John Conyers que ha pedido al presidente que haga públicas todas las justificaciones legales para autorizar el uso de estos ataques en el exterior con fines antiterroristas.
Aun así, el hecho de que EEUU realice ataques con drones no es nuevo. Una artículo en The New York Times de febrero señalaba la existencia de una base para estos aparatos en Arabia Saudí que se usaba para realizar ejecuciones selectivas de miembros de Al Qaeda.
Rafiq lo dejó claro ayer: “Si Obama quisiera escucharme”, ha señalado, “le diría que lo que ha hecho no es bueno y que le ponga fin cuanto antes”.
Testimonio de Zubair ur-Rehman, de 13 años
Testimonio de la abogada Jennifer Gibson
Noticias relacionadas de LaMula:
EE.UU. mata con un ataque de "drones" a militantes de Al Shabab en Somalia
Los aviones no tripulados son “legales, precisos y efectivos”
Escrito por
Politóloga, amante de la música y el buen vino. Buscando formas distintas pero posibles de hacer las cosas.
Publicado en
Aquí se publican las noticias del equipo de redacción de @lamula, que también se encarga de difundir las mejores notas de la comunidad.