Llegó con la espada desenvainada. Alejandro Toledo se tomó casi media hora para hacer una intervención inicial ante la Comisión de Fiscalización del Congreso en torno al caso Ecoteva reclamando la violación al debido proceso y exigiendo se le permita ejercer su derecho 'a ser oído'.

En tono enérgico, aunque asegurando que lo hacía con el mayor respeto, Toledo planteó cinco puntos según los cuales se comprobaba que no se había hecho una investigación clara sobre su presunta vinculación en las compras millonarias de su suegra e, incluso, comparó su caso con el de Alan García, haciendo alusión al fallo del Poder Judicial que anuló lo investigado por la Megacomisión.

"Antes de responder las preguntas, quiero dejar sentado mi legítimo derecho a ser oído. Esto no significa renunciar como cualquier ciudadano de a pie el respeto de un conjunto de garantías del debido proceso, que en mi concepto esta Comisión ha vulnerado desde el primer momento. Lo digo con debido respeto, porque lo cortés no quita lo valiente", señaló. 

Toledo apuntó también hacia algunos miembros de la Comisión asegurando que lo habían prejuzgado, adelantado opinión y declarado culpable, por lo que expresó su 'preocupación' a que cualquier 'ciudadano de a pie' sea investigado de la misma forma. 

"Podrán cuestionarme y decir todo por los hechos ya prejuzgado, pero el país sabe y es testigo que yo no me corro. Yo solo me asilo en el Perú porque este es mi país", señaló en clara alusión al fujimorismo.

Zeballos lo pone en su sitio

Sin embargo, lo que un Toledo nervioso -leyendo toda su intervención y temblando exageradamente- no esperaba, fue la inmediata respuesta del presidente de la Comisión, Vicente Zevallos, quien rechazó los puntos reclamados por Toledo y le recordó que él acudía ante dicho grupo parlamentario en calidad de investigado.

"Tiene usted todo el derecho como cualquier ciudadano de acudir al órgano jurisdiccional más pertinente, pero no confundamos, este no es el escenario para hacer validar los argumentos fácticos y de derecho en defensa de un derecho constitucional. Aquí ha sido convocado no para responder cuestiones de derecho sino de hecho", expresó.

Finalmente, invocó a Toledo que evitará provocar a los miembros de la Comisión con cualquier tipo de adjetivo.

"Apenas usted se sentó respetuosamente me dirigí a mis colegas y les invoqué cordura, madurez, prudencia y responsabilidad. Yo no esperaba invocar esto a usted", finalizó.

Aquí la intervención inicial de Alejandro Toledo al completo:

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