El 15 de octubre de 1983, en Francia, una marcha antirracista empezó a movilizarse en Marseille. Fue un grupo de 32 jóvenes de los suburbios los que tomaron la iniciativa, quienes llevaron una denuncia en sus bocas: discriminación y violencia por parte de la policía, en contra de ellos. El verano del mismo año en Minguettes, un suburbio de Lyon, un joven líder político de la zona fue traslado de emergencia al hospital herido de bala por la policía.

En menos de tres meses, la protesta llegó a París, un 3 de diciembre, sumando nada menos que 60 mil personas a la causa antirracista. Con el poder de convocatoria de ese movimiento, además de la atención que suscitó a nivel mundial , los marchantes organizaron una delegación para conversar con el presidente francés François Mitterrand. Sus demandas: otorgar diez años de residencia vigente a los inmigrantes, así como el derecho a voto para ellos.

Esta protesta, según los organizadores inspirada en el modelo de protesta no-violenta de Gandhi y Martin Luther King, significó la construcción de una imagen de nación francesa que quería dejar de arrastrar su pasado colonial, y con ella, el status de los inmigrantes norteafricanos afincados en los suburbios. Una nueva imagen de la nación francesa nacería del conflicto.

Marche des Beurs

Los medios llamaron a esta protesta masiva a "La marcha de los Beurs", aunque el título original fue "Marche pour l'égalité et contre le racisme". Se les decía 'Beurs' a los nacidos en Francia, con padres de origen africano. El término es un juego -reordenar y contraer- entre las sílabas de 'árabe' en francés. 

Enlaces relacionados:

La reseña de la prensa francesa del 15 de octubre de 2013

El levantamiento de las barriadas tiene una historia

La "Marche des Beurs" : de Marseille à Paris

En 1983 dans Libé : «Paris-Marseille : ça marche pour les immigrés»