Su hijo Miguel Sergio y su esposa, Noemí Josefina, que estaba embarazada de casi tres meses, fueron secuestrados la noche del 13 de setiembre de 1976 por la dictadura en Argentina. Desde ese momento, Raquel Gvirtz dedicó su vida a la defensa de los Derechos Humanos y la lucha por la justicia para que los culpables paguen por las desapariciones.

Gvirtz falleció este viernes y la organización a la que pertenecía, Madres de Plaza de Mayo, la homenajeó. "Raquel se consagró a la búsqueda de su hijo Miguel Sergio, de su nuera Noemí y de su nieto/nieta nacido/a en cautiverio desde aquel primer encuentro", dijeron, según cita Página12.

"Querida hermana, nos comprometemos a continuar tu lucha en la búsqueda de nuestros 30 mil desaparecidos", afirmaron las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora. Destacaron que fue "una de las primeras" en la organización.