El creciente aumento de incidentes violentos por grupos de la extrema derecha en Grecia ha sido constante en los últimos meses. Sin embargo, el asesinato del rapero y activista de izquierdas Pavlos Fyssas a manos de un neonazi, ha hecho saltar las alarmas del gobierno, en un punto de inflexión para evitar la desestabilización en un frágil clima social. 

Así, el primer ministro griego, Andonis Samarás, prometió que el Gobierno no permitirá que los neonazis "envenenen la vida política y social del país". 

 "La democracia es mucho más fuerte que lo que pueden imaginarse sus enemigos", subrayó Samarás, quien hizo un llamamiento a la población a evitar la tensión y la violencia. 

Hoy, Yorgos Rupakiás, asesino confeso del cantante, compareció ante un tribunal de instrucción, en medio de fuertes medidas de seguridad por la ola de indignación que ha causado el crimen en Grecia. Durante su declaración, Rupakiás, militante del partido neonazi Amanecer Dorado, reconoció ser el autor del acuchillamiento, que alegó hizo en defensa propia. 

El crimen ocurrió la madrugada del pasado miércoles después de que Fyssas y sus amigos se encontraran con un grupo de unos 25 "camisetas negras" -el grupo de choque de Amanecer Dorado- que los estaban esperando a la salida de una cafetería en el barrio de Keratsini, en las afueras de El Pireo. Posteriormente, llegó el ataque mortal con cuchillo. Rupakiás se acercó a Fyssas en un carro y le preguntó por el nombre de la calle en la que se encontraban, haciéndose pasar por un desconocido, lo que, según la policía, apunta a una emboscada premeditada. 

Esta mañana unas 3,000 personas vinculadas a asociaciones políticas, sociales, sindicales y comerciales de El Pireo se manifestaron contra el nazismo y Amanecer Dorado, que había convocado un reparto de comida "sólo para griegos" en dicha localidad contigua a Atenas. Además, la Policía detuvo ayer a tres personas armadas con cascos, escudos y lanzas en un registro en las oficinas de Amanecer Dorado en la localidad de Halkida, y, en la segunda localidad de Grecia, Salónica, incautó sprays, navajas, petardos y propaganda de Amanecer Dorado en un registro.

Ahora, el mayor temor es que se produzca una escalada de la violencia, tanto por parte de la extrema derecha como por grupos radicales de izquierdas. Entre las medidas para lograr la calma, el Ministerio de Justicia informó de que está preparando una enmienda legal que permita tipificar como delito la apología violenta de la agrupación Amanecer Dorado y otras acciones de violencia.

La pregunta que muchos se plantean ahora en el país heleno es si finalmente se ha llegado a un punto de no retorno en la respuesta contra el auge de la ultraderecha. "La respuesta del Gobierno ha sido más contundente esta vez, sí. Pero tenemos razones para dudar. Porque por un lado están las declaraciones de Samarás y por el otro la de su asesor Chrysanthos Lazaridis que hace paralelismos entre Syriza y Aurora Dorada. Hay una parte del partido que cree que cuanto más se radicalice Aurora Dorada más votantes les abandonarán y volverán a Nueva Democracia", señala Dimitris Christopoulos, profesor de Ciencia Política en la Universidad Panteion de Atenas.

Y es que resulta preocupante que en las elecciones de junio de 2012, Amanecer Dorado -de características mucho más agresivas que otras formaciones de extrema derecha europeas y cuyos simpatizantes llevan a gala su estética nazi-, logró el 6,9% de los votos. Es más, en las últimas encuestas le otorgan en torno a un 15%, lo que situaría a su formación en tercera posición, después de los conservadores de Nueva Democracia y de la izquierda de Syriza.

Con tintes xenófobos y racistas y sobre todo intolerantes con la inmigración musulmana, muchas formaciones neonazis están ganando han conseguido un avance electoral de los partidos ultraderechistas en Europa en los últimos años.  

Mañana Alemania celebra elecciones legislativas en las que concurren tres partidos de ultraderecha, aunque ninguno de ellos tiene perspectivas de lograr entrar en el Bundestag (Parlamento). Sin embargo, recordemos que en ese país, entre 1998 y 2011, tres personas pertenecientes al grupo terrorista neonazi Clandestinidad Nacionalsocialista (NSU) asesinaron a nueve inmigrantes y a una policía, sin que las fuerzas de seguridad relacionaran los hechos y los descubrieran.

¿Hacia dónde va Europa?

Con información de El País, Efe, Reuters, AFP

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