Esta mañana, en la Presidencia del Consejo de Ministros, representantes del Ejecutivo y de los mineros informales, se reunieron para retomar el diálogo. 

A dicha cita, se hizo presente la Federación Nacional de Pequeños Productores Mineros y Mineros Artesanales del Perú (Fenamarpe). Por el contrario, el presidente de la Federación Minera de Madre de Dios (Fedemin), Luis Otsuka Salazar, no asistió a la reunión y convocó a paro en Madre de Dios, para el 30 de setiembre.

Ante ello, el Fenamarpe descartó su participación en el paro. En declaraciones a la Agencia Andina, Celso Cajachagua, presidente de este grupo, señaló que este colectivo -que reúne a más de 280 asociaciones del rubro- "está decidido a participar del proceso de formalización."

Sobre el paro convocado, Cajachagua afirmó que toda acción de paralización de actividades debe de convocarse con previo acuerdo de las bases. "La Fenamarpe no convoca a ningún paro", dijo.

Por su parte, el alto comisionado en asuntos de formalización de la minería, Daniel Urresti, resaltó que se hizo una invitación pública al presidente de Fedemin, y que este la aceptó a través de un medio de comunicación. A pesar de ello, Otsuka se excusó por escrito por no asistir.

Además, Urresti señaló que el paro "lo promueven los mineros ilegales". "Esto no se trata de que ellos paralizarán sus actividades, cosa que no harán, sino que detendrán las de los demás, creando conflictos", afirmó.

Al respecto, el presidente del Consejo de Ministros, Juan Jiménez, afirmó que quienes realicen acciones ilícitas dentro del ámbito minero "no serán objeto de atención por parte del Estado sino que se les aplicará la ley".

Datos:

La minería ilegal moviliza alrededor de 3,000 millones de dólares al año en el Perú y genera unos 20 delitos conexos según el alto comisionado del gobierno para la interdicción de esta ilícita actividad, Enrique Álvarez.

Además, el 70% de la economía de Madre de Dios gira en torno a la minería informal o pequeña minería.